El representante del Ejecutivo ha realizado el trayecto entre la base de montaje de La Hiniesta y el cambiador de Pedralba en un tren de pruebas, y antes ha intervenido para reivindicar el valor de los trabajos para concluir este tramo de 110 kilómetros que beneficiará la reducción de los tiempos en los viajes desde y hacia Galicia.
Ábalos ha remarcado que la próxima apertura de este tramo "es fruto del esfuerzo de todos" y ha subrayado el valor de "la política del hacer, que vale más que la del decir", en una jornada en la que "los informativos agitan con titulares de alto voltaje".
El responsable de Fomento ha aludido a "la dificultad y la incertidumbre" de gobernar con un presupuesto prorrogado, pero ha advertido de que "nada se detuvo" y de que el Ejecutivo "no dejó de hacer lo que tenía que hacer".
En ese sentido, el ministro en funciones ha matizado que no le gusta "patrimonializar lo que es de todos" y ha reconocido el papel de anteriores ejecutivos a la hora de llevar a cabo una obra "que aún tiene que completar la fase de pruebas de seguridad", una parte del proceso que es "exigente y crítica", por lo que Ábalos ha abogado por "respetar los tiempos" y recordar que "la seguridad es la envolvente de las demás prioridades".
De todos modos, el ministro de Fomento ha explicado que, una vez se ponga en marcha el servicio, el viaje en tren entre Madrid y Orense bajará a las tres horas y media, mientras que también se producirá "algún ahorro" de tiempo en el trayecto entre la capital de España y Zamora.
"También seguiremos trabajando en el tramo Pedralba-Taboadela-Orense, que cuando se ponga en servicio reducirá el trayecto entre Madrid y Orense por debajo de las dos horas y media", ha recalmado Ábalos. La finalización de ese tramo reportará beneficios también a las principales ciudades del resto de Galicia.
Tras explicar estas cuestiones, Ábalos ha calificado la obra del tramo entre Zamora y Pedralba de la Pradería de "hito de la ingeniería", y ha apuntado que se trata de un trayecto que atraviesa 67 viaductos y 40 túneles, por lo que hay "pocos proyectos equivalentes" y "pocos países que lleguen a este nivel de vanguardia". "Debemos sentirnos orgullosos de haber superado este desafío de la orografía", ha afirmado.
Según José Luis Ábalos, este esfuerzo se enmarca en la idea del Ejecutivo de "vertebrar España en todos sus ejes", un plan que ha hecho extensivo a las carreteras, y concretamente a la A-11. "Hemos desbloqueado los tramos sorianos", ha advertido el ministro antes de subir al tren de pruebas.
Por último, Ábalos ha indicado que España "ha pasado de una línea aislada a un sistema complejo con la red más extensa de Europa" y ha advertido de que los retos se encuentran en la capacidad "para incrementar el número de usuarios, la calidad del servicio y el acceso a capas sociales más amplias".