"Tenemos la responsabilidad de informar a nuestros pacientes y a los profesionales sanitarios sobre los daños orales a corto y largo plazo que pueden acarrear este tipo de dispositivos electrónicos", ha dicho el presidente del COEM, Antonio Montero.
La iniciativa, que cuenta con la colaboración de la European Network for Smoking Prevention, y que puede seguirse en redes sociales a través de los hasthag '#CigarrilloElectrónico' y '#LaSaludPrimero', quiere hacer especial hincapié en que los dispositivos electrónicos se rigen por la normativa antitabaco, son perjudiciales para la salud y no ayudan a dejar de fumar.
"No debemos tolerar que los intereses comerciales de la industria del tabaco provoquen que nos expongamos a sustancias que agreden y dañan directamente a nuestros pulmones", ha señalado el presidente del Colegio de Médicos de Madrid, Miguel Ángel Sánchez Chillón.
Por su parte, la decana del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, Aurora Araújo, ha expresado el compromiso de su colectivo con la prevención y promoción de la salud, asegurando que estos dispositivos suponen un riesgo para la salud respiratoria de la población.
"Los farmacéuticos estamos comprometidos con todos los ciudadanos que quieran dejar el tabaco. Somos sus aliados y estamos preparados para informar y asesorar sobre las alternativas más eficaces de deshabituación tabáquica, sus riesgos y beneficios o para hacer cribados a la población fumadora", ha añadido el presidente del COFM, Luis González Díez.
Finalmente, el presidente de ENSP, Francisco Rodríguez Lozano, ha recordado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconseja el uso de los dispositivos de liberación de nicotina.