Los precios ascendieron en el mes de agosto en todas las provincias de Castilla y León con la excepción de Ávila. En el caso de la provincia de Zamora, los precios subieron dos décimas con una evolución interanual del -0,3 por ciento y una evolución en lo que va de año del -1,2 por ciento.
En cuanto a la evolución interanual, el -0,3 de Zamora la colocan ligeramente por debajo de la media regional en cuanto a las más deflacionista.
Estos números se explican, principalmente, porque los precios de los carburantes (gasoil y gasolina) bajan menos que el año pasado. También influye, aunque en menor medida, la subida de los precios de los automóviles por la finalización de las ayudas del plan PIVE. Y destaca la subida de los precios de la electricidad, frente al descenso de 2015.
Por su parte, los grupos con mayor influencia negativa son alimentos y bebidas no alcohólicas, que presenta una tasa anual del 1,4%, causada por la bajada de los precios de las legumbres y hortalizas frescas, las frutas frescas y los aceites, que subieron hace un año. Tambien influye el aumento de los precios del pescado fresco, menor que el registrado en 2015. Mientras, hoteles, cafés y restaurantes, con una variación del 0,3%, registraron este mes una subida de precios menor que hace un año.