En concreto, el precio medio del litro de gasóleo ha retrocedido hasta los 1,028 euros, tras abaratarse un 0,14%, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Por su parte, el precio de la gasolina, tras el ligero repunte de la semana anterior, ha caído un 0,039%, para situarse en los 1,162 euros el litro.
De esta manera, los carburantes confirman la estabilización en sus precios, después de la tendencia al alza que vivieron a lo largo del periodo estival, con incrementos desde el pasado mes de mayo, cuando cayó a mínimos por el desplome registrado durante el confinamiento por el coronavirus.
A pesar de las caídas de estas últimas semanas, el litro de gasolina todavía se mantiene en torno a un 8% más caro frente a esos mínimos de mayo, mientras que en el caso del gasóleo su precio es más de un 5% superior.
Con respecto a hace un año, el precio del litro de gasolina es actualmente casi un 11% más barato, mientras que en el caso del gasoil este abaratamiento llega al 15,5%.
No obstante, la gasolina sigue estando más barata en España respecto a la media de la Unión Europea (UE) y la zona euro, donde el litro cuesta 1,269 euros y 1,315 euros, respectivamente, al mismo tiempo que el litro de gasóleo cuesta de media 1,103 euros en la UE y 1,121 euros en la eurozona.
El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.