Según los alumnos, que se muestran bastante descontentos, la idea que plantea la Universidad es un 'candelabro' entre ambas carreras, una circunstancia que, bajo su punto de vista, supondría "una pérdida en la calidad de la enseñanza" al juntar, en una misma clase, a estudiantes de diferentes titulaciones que tienen similitudes, pero no son idénticas.
Del mismo modo, este cambio dentro de la Escuela Politécnica podría suponer el despido de alguno de los docentes que actualmente imparten clases en ambas disciplinas, siempre según las fuentes del alumnado consultadas. La puesta en marcha de esta medida estaba prevista para el próximo curso 2015-2016, aunque para no caer en la precipitación la Universidad podría retrasarla hasta el año académico 2016-2017.