En opinión de la organización, sería la "puntilla" para más de 700.000 personas trabajadoras autónomas del pequeño comercio que han realizado la inversión económica necesaria para tener en sus almacenes la mercancía de esta temporada primavera-verano.
Este sector lleva con su negocio cerrado desde el pasado 14 de marzo tras el decreto de estado de alarma aplicado por el Gobierno y permanecerán sin actividad hasta el 11 de mayo, en principio.
La referencia media de inversión de un pequeño establecimiento comercial multimarca se sitúa en 25.000 euros de compra de stock por temporada, lo que hace, según UPTA, "tremendamente complicado" poder sacar el producto a la venta sin apenas margen de tiempo para amortizar la inversión.
"De no llevar a cabo un retraso de la temporada de rebajas, ventas promocionales o análogas, los centros comerciales y las grandes marcas terminarán con miles de pequeños comercios en todo el país. Ellos tienen la capacidad de fabricar específicamente para las rebajas, y además, tienen los medios económicos para desarrollar grandes campañas publicitarias", ha señalado el presidente de UPTA, Eduardo Abad, que ha señalado que son muchas las grandes marcas que actualmente están realizando preventas con un 70% de descuento a través de sus plataformas de venta 'online'.
"Sería una auténtica irresponsabilidad que tanto el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, como las consejerías de las comunidades autónomas permitieran ventas con rebajas o descuentos especiales después del confinamiento", ha añadido.