FACUA-Consumidores en Acción reclama al Ministerio de Hacienda que suprima los prefijos 901 que mantiene operativos para las líneas de atención al usuario de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), con las que ésta ofrece información sobre cómo hacer la declaración de la renta o modificación de datos personales y bancarios, entre otras incidencias.
En una carta remitida al secretario de Estado de Hacienda y presidente de la AEAT, José Enrique Fernández de Moya Romero, la asociación ha reclamado a dicho organismo que deje de ofrecer alternativamente todos sus teléfonos 901 junto a otros que pueden inducir a error a los usuarios debido a que estos pueden entender que cuesta lo mismo llamar a uno u otro.
Las llamadas a números geográficos vienen incluidas actualmente en todos los bonos y tarifas planas de llamadas, por lo que no implican ningún sobrecoste. El usuario sí debe pagar, en cambio, por las que hace a un 901. Por ejemplo, si la llamada se realiza a través de un teléfono fijo Movistar, ésta tiene un coste de 4,84 céntimos por minuto, además de otros 9,68 del establecimiento de llamada. Si se llama desde un móvil, el coste es nada menos que de 31,30 céntimos por minuto, a lo que se debe sumar otros 31,20 del establecimiento.
Las gestiones que la Agencia Tributaria atiende en números 901 son la Información Tributaria Básica (901 33 55 33), el servicio de Cita previa general (901 200 351), el Centro de Atención Telefónica (901 200 345), la asistencia tributaria para pago telefónico o cumplimentación de datos (901 200 350) y Servicios automáticos (901 12 12 24).
La web de la Agencia Tributaria advierte al pie de la misma: "Las llamadas a los números 901 tienen coste compartido y el precio varía si se realiza desde un teléfono fijo o móvil". FACUA incide en que estas líneas suponen un perjuicio para los usuarios que disponen de bonos o tarifas planas de llamadas tanto en sus líneas de teléfono fijo como móviles, que son la gran mayoría.
Época de muchas consultas
Las líneas 901 eran beneficiosas para los usuarios hace décadas, cuando no existían los bonos ni las tarifas planas, al implicar que quien llama paga la mitad del importe y el que recibe la llamada la otra mitad. Pero hoy en día, se trata de una numeración que encarece sobremanera la facturación telefónica a la inmensa mayoría de consumidores que tienen que contactar con estos números.
FACUA subraya además que a lo largo de esta recién concluida campaña de declaración de la renta han sido miles los usuarios que se han visto obligados a solucionar multitud de incidencias a través de dichos teléfonos, teniendo que afrontar un sobrecoste por las llamadas más allá del plan de precios que tuvieran contratado con sus proveedores de teléfono.