Dicha reunión se produce por primera vez tras llevar casi ocho meses con los establecimientos cerrados, según han señalado los empresarios de ocio nocturno, quienes han lamentado que hasta el momento no se haya reunido con ellos ni la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ni la titular de Hacienda, María Jesús Montero, para poder conocer de primera mano las necesidades de un sector que aporta el 1,8% al PIB y agrupa a 27.000 empresas que generan de forma directa 250.000 puestos de trabajo y de las que dependen 40.000 autónomos relacionados con la música y las artes escénicas.
Así, los representantes de los trabajadores y empresarios del sector pondrán sobre la mesa una batería de once medidas de ayudas necesarias para garantizar la supervivencia y los puestos de trabajo del sector más perjudicado por la pandemia.
El sector no prevé poder abrir las puertas de los establecimientos a medio plazo, por lo que estima que, a lo largo de la temporada de invierno, el 60% de las salas tendrá que cerrar definitivamente como negocios.
Por este motivo, la federación trasladará mañana en la reunión con el secretario de Estado de Turismo un plan de contingencia y ayudas "imprescindibles" para que las empresas puedan sobrevivir mientras no puedan recuperar la totalidad de su actividad y a sus trabajadores.
"El sector demanda que la ministra de Hacienda se implique de forma urgente en la elaboración de este plan de ayudas, llevamos más de siete meses sin poder ejercer nuestra actividad y con un horizonte próximo dramático con el que no contamos con ninguna fecha para poder reabrir nuestros negocios", ha señalado desde la federación.
Entre las demandas que exige el sector de ocio nocturno figuran subvenciones directas por parte del Ministerio de Turismo o el Ministerio de Cultura en su caso, a fondo perdido, como se ha realizado recientemente con otros sectores de actividades culturales y de espectáculos y ayudas para mantener los costes fijos mínimos de las empresas para que no se vean obligadas a cerrar definitivamente.
A ellos se suman la exención de pagos de tributos y tasas municipales mientras hayan permanecido cerrados los establecimientos, un plan de exenciones fiscales de los pagos a cuenta del Impuesto de Sociedades del ejercicio 2020, y nueva moratoria en los pagos trimestrales del IVA y del IRPF o la creación de líneas de crédito específicas, a través del ICO, y sin intereses para inyectar liquidez a las empresas.
También exigen la modificación de la Ley 37/1992 del 28 de diciembre del IVA con el fin de aplicar en el sector un tipo de IVA reducido del 4% hasta que la actividad recupere la normalidad, la prórroga de los ERTE hasta septiembre de 2021 y ayudas directas a las salas del sector, a través de las comunidades autónomas, mediante subvenciones para el pago de intereses propios de la financiación de las empresas, tanto del activo circulante, como del activo fijo.