"La mayor parte de las empresas del sector, después de ocho meses sin facturar, no se encuentran al corriente de pago de impuestos, ni de cotizaciones ni de alquileres, lo que conlleva que puedan sufrir embargos. La única fórmula que existe para levantar dichas ejecuciones es acudir a un concurso de acreedores pero, si van a concurso, irán directas a liquidación ya que, hoy por hoy, es imposible presentar a los acreedores un plan de viabilidad realista", ha señalado el secretario general de 'Spain nightlife', José Luis Benítez.
Por ello, ha considerado vital que estas empresas reciban de manera urgente ayudas a fondo perdido y que se suspendan o aplacen los tributos y cotizaciones a la Seguridad Social, pues de otra forma "no llegaran vivas" ni al 14 de marzo de 2021 ni a la primera cuota de los ICO.
Por ello, el sector del ocio nocturno sigue exigiendo ayudas a fondo perdido urgentes y eficaces a muy corto plazo, como las que se han concedido en Italia, de hasta 150.000 euros por local. A tal efecto, calculan que ahora mismo haría falta inyectar aproximadamente 5.000 millones de euros al sector para garantizar la supervivencia de la mayor parte de las empresas de ocio nocturno del país.
En concreto, el sector demanda ayudas urgentes a fondo perdido para mantener los costes fijos mínimos de las empresas, y en especial los alquileres, para que puedan mantenerse vivas hasta la reapertura, la suspensión del pago de toda clase de tributos y de cotizaciones a la Seguridad Social durante el 2020, la ampliación de la moratoria para presentar concurso de acreedores por tiempo de seis meses más, hasta junio de 2021 y la prórroga de los ERTEs hasta mayo de 2021 y con exoneraciones del 100% en cotizaciones.
A ello se suma ampliar entre uno y tres años el periodo del plazo de carencia para la devolución de los préstamos ICO, la creación de nuevas líneas de préstamos ICO sin intereses para inyectar liquidez a las empresas, rebajar el IVA turístico al 4% hasta un año después de que la actividad recupere la normalidad para incentivar el consumo y establecer moratorias en préstamos hipotecarios de inmuebles afectos a la actividad, para evitar dañar la liquidez de las empresas.
La creación de planes para el mantenimiento de los empleos de los 250.000 trabajadores del sector y la puesta en marcha, conjuntamente con las comunidades autónomas, de pruebas piloto a través de test rápidos en determinados locales para empezar a trabajar soluciones de reapertura a medio plazo en espacios seguros y controlados son otras de las propuestas del sector.