Hace unas semanas la DGT anunciaba la ampliación de su plantilla de radares móviles que aumenta en 70 sus hasta ahora 545. De tal manera, que desde ya la DGT cuenta con 615 radar móvil, para los que se han gastado la friolera cifra de 610.678,25 euros, según señala el diario ‘Centímetros Cúbicos’.
Como ya se ha adelantado en más de una ocasión, tanto por parte de la DGT como del Ministerio del Interior, los diferentes radares están distribuidos a lo largo de toda la orografía española, teniendo principal eficacia en las vías secundarias y convencionales, aunque ahora también están presentes en las autovías.
Su pequeño tamaño los hace más invisibles a ojos del conductor y sobre todo, más manejables. Y en su manejabilidad es donde se esconde la novedad: su ubicación. Además de poder ser manejado a larga distancia, gracias a su tecnología láser, su nuevo equipamiento permite que este dispositivo radar se adapte no solo a vehículos de cuatro ruedas, sino también a motocicletas. De esta manera, su utilización se adapta a cualquier agente que se encuentre patrullando por la zona.
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