Las intervenciones realizadas en Castilla y León parareorganizar la asistencia sanitaria en Atención Primaria han sido muy limitadasdesde que fuese implantada en 1985, sin profundizar y resolver las dificultadeshistóricas como el tamaño reducido de las plantillas o la mejora de lacapacidad de fidelización de nuevos profesionales en el servicio de salud.
En este sentido, una medida de la Consejería de Sanidad fuela creación de los médicos y enfermeros de área en 2006, a los que no dotó dehorario laboral propio, de un centro de trabajo determinado o funciónasistencial específica, creando vinculaciones laborales de gran inestabilidadque permitían disponer de forma permanente de este personal para realizar lascoberturas que fuesen necesarias. Esta medida fue única en España, optando enel resto de servicios sanitarios por otros sistemas organizativos que se handemostrado más productivos y eficientes, siendo crucial en Castilla y León elreconocimiento judicial del derecho al descanso después de realizar lasguardias en 2011, así como su particular aplicación y reconocimiento alpersonal en el Servicio de Salud, que es motivo reiterado de reclamación de lospacientes al crear dificultades para ser atendidos por su médico o enfermera dereferencia.
La reciente pandemia por COVID-19 ha acentuado aún más lacrítica situación que atravesaba este nivel asistencial, en el que unaplantilla reducida de profesionales con jornadas ajustadas al máximo de horasextraordinarias (complementarias) o incluso superándolas de forma voluntaria,ha generado innumerables dificultades para la cobertura de sustituciones y parala contratación de nuevos profesionales, conduciendo a un sistema organizativomenos productivo de lo que cabría esperar por la formación y experiencia delpersonal con el que cuenta, así como de la inversión económica de la que estádotado para la consecución de los objetivos que persigue.
Con el fin de analizar en profundidad esta situación, ypoder aportar soluciones para garantizar un modelo sostenible a largo plazo enAtención Primaria, la Agrupación de Profesionales de Área de Castilla y León(AMEACyL) en colaboración con la Federación Nacional de Médicos y Enfermeros deAtención Continuada (FEMEAC), ha realizado un estudio sobre los aspectosorganizativos de la Atención Continuada y la gestión de su personal, poniendoen valor la eficacia del sistema y la eficiencia del servicio prestado, laefectividad y calidad de la asistencia ordinaria y urgente, o las consecuenciassocio-laborales del modelo, considerando para ello los fundamentos que debenregir la gestión de la Administración Pública. Todo ello, en función de losmétodos de trabajo y de los fines que se persiguen en Atención Primaria,recuperando su concepción como la puerta de entrada eficaz al resto del sistemasanitario.
Entre las múltiples conclusiones del estudio, publicadoíntegramente en la web de la Agrupación y ya remitido a la Consejería deSanidad, destaca el elevado coste de la cobertura de las urgencias de loscentros de salud a nivel regional, consecuencia de la falta de intervenciónsobre un sistema de gestión de personal que no se ha ido adaptando a lasresoluciones judiciales de la última década de forma eficiente, al no podergarantizar que los profesionales realicen íntegramente la jornada por la queson retribuidos en sus nóminas, y generando así mayores costes de sustitución yfrecuentes vacíos asistenciales.
De hecho, la organización actual en Castilla y León suponeun mayor coste para la Consejería de Sanidad que la creación de un cuerpoespecífico de profesionales para la atención de Urgencias de los Centros deSalud, lo que mejoraría la calidad asistencial, tanto en las consultas como enlas urgencias fuera del horario habitual de consulta, además de contribuir a lareducción de las listas de espera en Atención Primaria.
Por otro lado, se producirían mejoras evidentes en laconciliación social, familiar y laboral de todos los trabajadores y segarantizaría la realización íntegra de la jornada del personal evitando losconstantes cambios de turno de la actualidad, además de crearse puestos detrabajo más atractivos que facilitarían la fijación de nuevos médicos yenfermeras en nuestra comunidad, permitiendo de esta forma la ampliación de lasplantillas y reduciendo el coste final del servicio para la Administraciónentre 56 y 65 millones de euros al año. De esta forma, se pondría freno a laincesante emigración de profesionales en busca de mejores condiciones detrabajo, permitiendo su estabilización laboral en Castilla y León.
Desde la puesta en funcionamiento del Gobierno Regional en2019, la Consejería de Sanidad ha venido reclamando un incremento del presupuestoasignado a Sanidad, si bien los resultados del estudio evidencian que esposible reducir el coste de la cobertura del Servicio de Urgencias de losCentros de Salud al mismo tiempo en que se realizan innumerables mejoras delsistema, y que incluso permite la ampliación de la plantilla reorganizando deforma eficaz las funciones de sus profesionales.