¿Cómo ha evolucionado la asociación en estos diez años?
Se han conseguido muchas cosas. Empezamos con servicios muy básicos, lo que era un psicólogo de apoyo a las familias y algo de intervención para los pequeños. Empezamos con una sede pequeñita y a día de hoy contamos con dos sedes, con un equipo multidisciplinar muy completo con pedagogos, asistente personal, psicólogo, equipo educativo… Hemos avanzado muchísimo.
¿Qué reto tienen todavía por cumplir?
Nos faltaría cubrir la etapa adulta, porque lo que es la etapa escolar está bien programada. Por eso, estamos trabajando para que una vez que acaban esa etapa y llegan a la parte adulta, poder buscarles unos talleres, unos centros de día, una residencia…
¿Cómo es el día a día de la asociación?
El área de gestión que tenemos es súper importante porque se dedican a la búsqueda de proyectos, a cualquier tipo de duda que se le presente a los padres, para tramitarles becas por ejemplo. Luego por la tarde tenemos la intervención con los pequeños, ya que por la mañana están en el colegio. Se trabaja con ellos bien en el área de lenguaje, en el aspecto psicológico, en el educativo o de asistente personal, que también por las mañanas existe ese servicio.
¿A cuántas personas ofrecéis soporte?
Principalmente a los treinta y dos socios, pero luego también a cualquier persona que llegue que no tiene por qué ser socio. Si tiene Trastorno del Espectro Autista se le atiende.
¿Está concienciada la sociedad con este tipo de trastorno?
La asociación también está para eso, para hacer constantes campañas de formación en los colegios, que sabemos que son edades complicadas. Se trabaja con ellos mediante campañas y sí es verdad que cuesta un poco entender este trastorno, hasta para un adulto, pero estamos trabajando en ello para que cada vez se quiten más falsos mitos que hay y que se conozca de verdad las personas con autismo y borrar de la mente de la gente cosas que se han dicho que no son verdad sobre este tipo de trastorno.
¿Cómo subsiste la asociación?
Tenemos apoyos en forma de subvenciones de las instituciones públicas y organismos y aparte los padres aportamos nuestras cuotas por servicio. También recibimos ayudas individualizadas de la dependencia. Necesitamos por tato el trabajo de todos.