El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha participado hoy en la Conferencia Europea de Diputaciones provinciales, Comunidades Autónomas y Administración General del Estado para la repoblación rural y territorial, que se ha celebrado en el Parador de Gredos, donde ha puesto de manifiesto que Castilla y León lleva mucho tiempo trabajando en la búsqueda de una solución para este problema global, y ha destacado algunos hitos como el haber liderado, junto con otras Comunidades, el texto aprobado en la última Conferencia de Presidentes, por el que se acordó elaborar una Estrategia Nacional sobre los Retos Demográficos. Sin embargo, esta Estrategia sigue pendiente, tres años después, por lo que, desde la colaboración y la lealtad institucional, Fernández Mañueco ha instado al Gobierno de España a aprobar cuanto antes esta Estrategia, que debería incluir recursos económicos suficientes.
Pero la puesta en marcha de estas medidas, según ha destacado, están estrechamente vinculadas a la aprobación de un nuevo modelo de financiación de las Comunidades Autónomas, resultado de un consenso multilateral en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Un nuevo modelo que cuente con más recursos, atendiendo a la dispersión geográfica, la extensión territorial, el envejecimiento de la población, y la baja densidad demográfica, puesto que todos ellos son factores clave en el coste de la prestación de los servicios.
Asimismo, el presidente de la Junta ha abogado por que la UE, en el nuevo marco financiero 2021-2027, disponga de recursos específicos e independientes para afrontar el reto demográfico. En este sentido, ha propuesto el establecimiento, dentro de la política de cohesión, de una nueva línea de financiación.
España de las oportunidades
En cuanto a Castilla y León, el presidente de la Junta ha reiterado la necesidad de poner en valor la imagen y el potencial de los territorios más afectados por los riesgos demográficos, motivo por el que apostó por hablar de la “España de las oportunidades” frente a la “España vaciada”.
Todo ese potencial y oportunidades, ha señalado, requieren del compromiso de todos: a nivel local, autonómico, nacional y europeo. En este punto, ha recordado su compromiso de investidura acerca de que todas las políticas de la Junta de Castilla y León tengan en cuenta la perspectiva demográfica.
Así, ha reiterado la defensa de una sanidad pública universal, gratuita y de calidad, con hospitales avanzados en las ciudades, pero también con médicos y consultorios en los pueblos, así como de unos servicios sociales y de atención a la dependencia y una educación de máxima calidad, con escuelas de infantil y primaria abiertas allí donde estudien al menos 3 niños.
Asimismo, ha recordado compromisos como el garantizar un transporte al alcance de todos, impulsando el transporte a la demanda, y la implantación de un Bono de Transporte Rural, con tarifa plana anual, y tarifa súper reducida para las personas mayores y los jóvenes.
Igualmente, en este ámbito destacan los esfuerzos para que la red de internet llegue a todos los núcleos de población, para lo que se están movilizando 130 millones, o las facilidades para el acceso a la vivienda, con ayudas al alquiler para jóvenes en el mundo rural.
En cuanto a las políticas de conciliación de la vida laboral y familiar, ha destacado las nuevas ayudas a las familias para gastos de guardería, que complementarán la desgravación fiscal que la Junta ya aplica, y el impulso al programa Crecemos para los niños de 0 a 3 años en el mundo rural o la extensión del Programa Conciliamos y creando el programa «Canguros», de atención diurna en los municipios más pequeños.
Medidas económicas
Entre otras medidas que también sirven para hacer frente al reto demográfico, Fernández Mañueco ha apostado por una fiscalidad inteligente y moderada, que prevea un trato positivo hacia el mundo rural y las zonas con menos población. Como ha sido la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Pero fundamentalmente, en la lucha contra la despoblación es prioritario el mantenimiento y la creación de empleo. Para ello, la Junta de Castilla y León va a seguir favoreciendo el crecimiento y el acceso a la financiación de las empresas, para lo que, entre otras medidas, se ha abaratado el precio del suelo industrial de titularidad de la Junta, una media del 25%, para facilitar la llegada de nuevas empresas e inversiones. Y se mantiene el compromiso de extender la tarifa plana para nuevos autónomos, como mínimo, los primeros 24 meses, una medida que llegará a los 30 meses si el autónomo emprende en municipios menores de 5.000 habitantes.
Por último, el presidente se ha referido a la necesidad de desarrollar un nuevo modelo productivo, a la vanguardia de la nueva sociedad del conocimiento, que potencie la innovación y la transformación digital.