El presidente de la Junta y del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, criticó hoy cuando el Gobierno central se refiere a la “armonización fiscal” ello se traduce en “hachazo a los bolsillos de las familias y empresarios” y defendió que la “moderación fiscal es congelar impuestos”, frase que aprovechó para destacar que la Comunidad es que “mayores beneficios fiscales tiene para las familias”.
Así lo aseguró durante su participación en el XVI Congreso del PP de Andalucía, que hoy empezó en Granada y, en el que compartió coloquio con el jefe del Ejecutivo andaluz, Juanma Moreno, de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, y el de Ceuta, Juan Vivas.
Mañueco presumió de haber estado en la toma de posesión de Juanma Moreno como presidente de la Junta de Andalucía en enero de 2019 y aseguró ver en las caras de los ‘populares’ andaluces la “ilusión y esperanza”. A su juicio, el cambio “funciona en Andalucía y las políticas eficaces de Juanma Moreno también, porque ha dado el impulso necesario y esta Comunidad funciona, gracias a ti y al PP”, se dirigió al líder andaluz.
Por ello, instó a todos los presentes a “cumplir con el compromiso de llevar el mensaje de ilusión y esperanza a todos los rincones de Andalucía” para que vuelva a ser presidente de Andalucía. “Esta Comunidad es fundamental para que Pablo Casado llegue a La Moncloa”, insistió, en un escenario en el que también tienen un “papel fundamental” Galicia, Madrid, Castilla y León, Murcia y Ceuta, “pero toda España”.
El jefe del Ejecutivo autonómico se refirió al “impulso de las políticas” desarrolladas por Moreno, ejecutadas “desde la moderación”. “A veces nos llaman moderados”, ironizó Mañueco, quien defendió que “moderación no es incompatible con defender con firmeza aquello en lo que crees”. En este punto citó la unidad de España, la Constitución de 1978, el Estado de las Autonomías, la Unión Europea, la educación pública, “pero la libertad para poder elegir centro público o concertado”, “mimar a las personas mayores, creer en el mundo rural, en los agricultores y ganaderos que lo están pasando francamente mal en este momento...”
En materia sanitaria, recordó que Castilla y León cuenta con la mayor red sanitaria de España, con 247 centros de salud y 3.200 consultorios, que “atienden con regularidad los profesionalidad sanitarios”. Y recordó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció que “iba a transformar la sanidad con inversiones de 1.500 millones de euros en tres años, 500 de ellos de la iniciativa privada”. “Puedo entender que la cifra asuste de inicio. Pero solo en Castilla y León, en 2022, destinaremos en sanidad 4.400 millones de euros. Ese no es el esfuerzo en sanidad que tiene que hacer el Gobierno. Necesitamos liderazgo, que se diga cómo afrontar las próximas semanas en la lucha contra el COVID y que coordine a las comunidades autónomas”, sentenció.
También lamentó el “sonrojo” de ver “cómo elimina los exámenes extraordinarios en materia de educación” y tachó al presidente del Gobierno de esconderse ante “cuestiones que suenan a problemas”, como la financiación autonómica. “Está ausente y ha declinado de responsabilidades”, sostuvo.
Por último, como presidente de la Junta, admitió llevar “la carga” sobre sus hombros de aquellos que le precedieron: Aznar, Posada, Lucas y Herrera. “Pero hemos dado un cambio de visión y hemos apostado por proteger a los más vulnerables, apostar por la transformación y modernización de Castilla y León y generar oportunidades de futuro, como se hace en Andalucía”. concluyó.