Decenas de personas de CCOO Y UGT se concentraron en la Plaza de la Constitución, frente a la Subdelegación del Gobierno con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género bajo el lema “Por un presente y un futuro sin violencia machista para las mujeres” para denunciar una lacra que ha acabado con la vida de 41 mujeres en lo que va de año en España. Alba Pérez, técnica de igualdad de Comisiones Obreras, fue la encargada de alzar la voz en representación de los sindicatos para destacar la gravedad de la violencia machista. En su intervención, Alba Pérez señaló que esta violencia constituye una realidad “terrible” que necesita ser visibilizada, denunciada y erradicada. Aseguró que la igualdad, la justicia y la libertad solo serán efectivas cuando se elimine la violencia de género, que sigue siendo estructural en todos los ámbitos de la vida.
Lamentó las escalofriantes estadísticas sobre los feminicidios, destacando que en lo que va de año, 41 mujeres han sido asesinadas por sus parejas, dos de ellas pertenecientes a Castilla y León. Además, sostuvo que el número de víctimas mortales desde 2003 supera los 2.200 victimas en toda España. En esta misma línea, resaltó la alarmante cifra de 10 menores asesinados pro violencia de género en 2024, la cifra más alta desde 2013. La técnica de igualdad reflejó que los feminicidios no se limitan a los asesinatos de parejas o exparejas, sino que también incluyen agresiones en el ámbito familiar, social y sexual.
La violencia sexual fue otro de los puntos críticos abordados. El movimiento Me Too contribuyó a romper el silencio sobre las agresiones sexuales. Actualmente, en España se denuncian 14 violaciones al día, lo que equivale a una cada dos horas. "La concienciación y la reducción de la tolerancia social ante estos delitos son esenciales", afirmó Pérez, quien también destacó la necesidad de ofrecer asistencia integral a las víctimas y garantizar su reparación. En este sentido, resaltó que los centros de trabajo no están exentos de las violencias machistas, especialmente el acoso sexual, un fenómeno que sigue siendo ampliamente invisibilizado.
Por último, hizo un llamado a las autoridades públicas y a las instituciones para reforzar las medidas contra la violencia de género. Exigió la aprobación de la Ley de Violencia de Género de Castilla y León, así como una mayor transparencia en la distribución de fondos destinados a combatir esta problemática. También abogó por la creación de centros de atención 24 horas para víctimas de violencia sexual, el cumplimiento de los protocolos de prevención en las empresas y la mejora de las condiciones laborales de las trabajadoras de la red de atención. Finalizó su intervención convocando a la ciudadanía a participar en las manifestaciones programadas en Zamora para continuar luchando por un futuro sin violencias machistas
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