El absentismo se da más en la industria y en el sector servicios, mientras que la construcción se encuentra en el lado opuesto. Son datos del VIII Informe de Absentismo elaborado por Adecco, que refleja que en el primero de los casos este llegó a un 5,6% por el 5,4% del segundo. En la construcción, por su parte, se sitúa en el 3,6%.
Según reflejan esto no se trata de una novedad. De hecho, la industria es el sector que de manera común presenta un mayor número de horas perdidas por absentismo, con 99 por trabajador y año durante el año pasado por las 65 de la construcción.
Son las actividades vinculadas al cuidado de la salud, administraciones públicas y defensa e industrias extractivas donde más horas se pierden. En el lado contrario, con menos de 65 horas, se encuentran la hostelería, actividades inmobiliarias, educación y actividades profesionales, científicas y técnicas.
Ello tiene que ver, además, con las horas pactadas efectivas. De hecho, la educación y las actividades artísticas y de ocio son los subsectores que exhibieron menos, por debajo de las 1.400 horas, mientras que en el caso de la construcción, industrias extractivas, manufacturas e información y comunicaciones, las horas de trabajo pactadas efectivas superaron las 1.750 por año. En resumen, los 18 subsectores de actividad analizados presentan un descenso en el número de horas de trabajo pactadas efectivas.
Incapacidad temporal
Dentro de las causas por absentismo, los procesos de baja laboral por incapacidad temporal son una de las más recurrentes. Así, 6 de cada 100 trabajadores no acudió en todo el año a su puesto de trabajo.
En función del tipo de baja, el 85,5% se derivan de contingencias comunes, con un aumento del 12,7% respecto 2017. En esta tipología de absentismo, la baja y asistencia sanitaria se presta por el Servicio Público de Salud de cada comunidad autónoma y las prestaciones económicas son gestionadas por la mutua desde el día 16 de la baja médica.
En función del género, las mujeres registran un mayor índice de bajas de más de 90 días que los hombres y aumenta entre los grupos de mayor edad. Así, al comparar los procesos de baja de trabajadores mayores de 55 años y menores de 24 años, hay una variación de 194% en el caso de los hombres y 223,6% en mujeres.
La mayor parte de los procesos de bajas por contingencia común tuvieron una duración de hasta 15 días (68,51%) y representan el 8% del total de días de baja. Sólo el 10% se alargó más de 90, suponiendo el 69% del total de días. No obstante, se registra una tendencia al incremento de la media de bajas de larga duración, que registraron el pasado año 275,18 días de duración media; concretamente, 281,59 en el caso de los hombres y 270,72 en mujeres. Al comparar esta cifra con la media de bajas de larga duración en 2009, se observa una variación al alza de 19,8%.
En cuanto al absentismo por contingencias comunes en función del tamaño de las corporaciones, se reduce la frecuencia de estos procesos en pequeñas empresas que no superan la decena de trabajadores, en las que se registran un 62,83% menos de absentismo por enfermedad o accidente no laboral que en compañías de más de 250 trabajadores. La media de días de absentismo es también inferior, hasta un 49,47% menos.
Por otra parte, el absentismo de origen profesional (accidente de trabajo y enfermedad profesional), supone el 14,54%. Procesos en los que la asistencia sanitaria y prestaciones económicas son cubiertas por la mutua a partir del día siguiente al de la baja.