En primer lugar, ¿En qué momento nace la Federación Castellano y Leonesa de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales?
A nivel de Castilla y León, el colectivo LGTB+ nació como Federación hace unos 8 años aproximadamente aunque sí es cierto que dentro de Castilla y León ya había ciudades que contaban con asociaciones en defensa de la igualdad y la libertad afectivo-sexual como la asociación "Iguales" en Salamanca que lleva más de 15 años trabajando y luchando por la igualdad y una visualización real.
Como presidente de la Federación CyL de LGTB+, ¿notan discriminación por parte de la sociedad?
Según los datos que poseemos sobre un estudio que analiza el número de matrimonios del mismo sexo por población, los números reflejan que en Castilla y León es la comunidad donde menos matrimonios se producen. Es una situación complicada porque la gente o no se casa, o se casa fuera, o por el contrario y mucho peor, no se atreven a visibilizarse por miedo.
¿Existen medidas legislativas en Castilla y León dirigidas a este colectivo?
Ninguna. En Castilla y León no existe ninguna medida y de ahí la diferencia con otras comunidades. Estamos en una comunidad que sociológicamente nos muestra que hay muchos núcleos de población, la mayoría de ellos muy pequeños y dispersos y con una población muy envejecida donde se dan casos de discriminación que obligan a la gente a irse o a callarse.
¿Para el colectivo LGTB+ supuso un hecho especial la aprobación de Ley que permitía el matrimonio entre personas del mismo sexo?
Evidentemente sí. Era una discriminación legal muy clara hacia un colectivo de personas. Una vez que se elimina esa discriminación legal, el Estado reconoce esa igualdad que antes se negaba a ciertos ciudadanos discriminados por su condición sexual. Supone un antes y un después también porque hay una mayor aceptación por parte del resto de la sociedad.
Este es el segundo año que se ha celebrado la manifestación "oficial" del día del Orgullo en Valladolid, ¿algún año se celebrará en otro lugar de la comunidad?
En efecto, este es el segundo año que se celebra esta fiesta del Orgullo en Valladolid y podemos decir que hemos sentido en todo momento mucho apoyo institucional por parte del Ayuntamiento y de las diferentes entidades colaboradoras. Hasta el momento no hemos debatido de forma interna esa idea de alternar el lugar de la celebración, aunque es de valorar. Ahora mismo en lo que estamos centrados es en conseguir que la Junta elabore una Ley de Igualdad social LGTB+ que dé cobertura y derechos educativos o sanitarios, por ejemplo, a muchas personas que los reclaman.
Por último, en Zamora durante el sábado y el domingo ondea la bandera arcoíris en el Ayuntamiento a propuesta del nuevo equipo de gobierno y con el beneplácito de los demás grupos que conforman el Ayuntamiento, ¿bonito gesto simbólico por la unidad de los grupos y por la visualización del movimiento?
Es una excelente noticia. Es un reconocimiento simbólico hacia el colectivo y a la vez es un toque de atención a la ciudadanía de que hay que trabajar por la igualad de un colectivo discriminado. No hay que olvidar que Zamora es la segunda provincia de todo el Estado español donde según los datos que manejamos, menos matrimonios entre personas del mismo sexo se celebran. Por ello el gesto adquiere una mayor relevancia.
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