La Plaza Mayor de Zamora se convirtió en la madrugada del pasado viernes en el escenario de protesta para los hosteleros zamoranos contra las nuevas restricciones contra el ocio nocturno. "No somos una amenaza, somos parte de la solución", fue el mensaje que pudo leerse a los pies de la protesta.
Los hosteleros guardaron un minuto de silencio escenificando "la muerte" del sector que supone el cierre de los bares a la una de la mañana. Una protesta y petición que llega de la mano de propuestas de los propios hosteleros, que aseguran que este prematuro cierre propicia reuniones privadas que llegan a enmarcar mayores peligros.
Esta protesta se realizó en otros puntos de la comunidad, con la voz al unísono del mundo de la noche contra el nuevo horario de cierre.
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