Los hosteleros de Castilla y León han reclamado a la Junta que apruebe un plan de desescalada para el sector siguiendo el modelo establecido en Madrida, además de ayudas directas para los establecimientos con carácter de "urgencia".
La Confederación Regional de Hostelería y Turismo ha registrado ante el Ejecutivo autonómico el informe que el pasado lunes 23 de noviembre solicitó el vicepresidente del Ejecutivo Regional, Francisco Igea, al sector.
En ese escrito, la Confederación solicita la adopción de un plan de medidas "urgentes" con el fin de poder llevar a cabo el rescate y reactivación de la situación económica que permita paliar los efectos de la pandemia ocasionada por la COVID-19, salvaguardar el empleo y contribuir a frenar el número de establecimientos abocados al cierre como consecuencia de la crisis, no solo en el sector sino en otros que dependen indirectamente de él, recoge un comunicado remitido a Europa Press.
"La denominada desescalada ha conllevado a que muchas empresas abrieran con un gran esfuerzo, lo que ha supuesto perdidas económicas en las mismas; y si bien, durante estos meses, se han asumido con responsabilidad y gran esfuerzo, por parte de empresarios y trabajadores la aplicación de todas las medidas preventivas (incluso el cierre total) y restricciones a su actividad, ahora urge buscar medidas de rescate y reactivación del consumo y del turismo para evitar que las perdidas conlleven la desaparición de muchas empresas creadoras de empleo directo e indirecto", añade.