La Junta de Castilla y León ha informado de que a partir deeste viernes la hostelería podrá reabrir sus puertas en la provincia de Zamora.Una noticia que, a priori, parece un alivio para el sector pero que desdedentro se observa con cierto recelo.
Óscar Somoza, representante de los hosteleros zamoranos, haaclarado a Zamroa24horas que en los últimos días la norma que permitía abrirlas terrazas no ha sido “válida” debido a las bajas temperaturas, pues “noestamos en tierra de terrazas” y, además, se han encontrado conque la normativamunicipal “llega tarde”.
A partir de este viernes la reapertura podrá realizarsesiguiendo las restricciones que había previamente como son la limitación deaforo o el consumo en la barra, entre otras medidas, algo que ven con buenosojos pero que les sigue preocupando viendo los casi nueves meses que llevanarrastrando la situación producida por la pandemia.
En este sentido, Somoza reconoce que en Zamora tienen ya lamirada puesta en la época de primavera y Semana Santa. Con la Navidad “perdida”,el sector se aferra a la llegada de las vacunas para recuperar el terreno a unaño que “no se va a recuperar”. Y es que el representante de los hosteleroszamoranos reconoce que el toque de queda, la falta de movilidad y la ausenciade cenas de empresa o grupos de amigos dejan muy tocada la actividad en estasfechas.
Por ello, desde la hostelería se sigue reclamando la llegadade las ayudas del Plan de Choque del Gobierno, así como ayudas de todas lasinstituciones. “Ninguna medida llega”, asegura Somoza, poniendo énfasis en quellevan casi nueve meses inmersos en esta realidad y las ayudas inicialesestaban previstas para un plazo de dos.
Asimismo, piden que se exima a los negocios que no hanpodido trabajar del Impuesto de Actividad Económica. “Si no hay actividadeconómica…”, reitera el representante del sector, pidiendo una excepción paralos hosteleros al no haber podido trabajar durante un plazo de tiempo y, cuandolo han hecho, en condiciones complicadas. “Se veía esperanza con el verano”,sentencia, evidenciando el camino tortuoso que ha seguido la hostelería yreconociendo que la perspectiva es que en España tengan que bajar la trapa definitivamente el 30% delos negocios del sector.