Pasear, mirar, saborear y comentar. Esta está siendo la tónica dominante de las primeras horas de la Feria de Fromago. Zamora tiene un color especial o mejor dicho, un aroma especial, porque la segunda edición de la feria del queso está siendo un éxito en el que los queseros y queseras de toda España y de los diferentes puntos de Europa y del Mundo están dando a conocer sus productos a la provincia.
Son días festivos, días para llevarse un, varios o muchos trozos de queso a la boca y comprar aquellos que han conquistado el paladar. Los 300 stands ya han abierto al público y los queseros ya ocupan su sitio para ofrecer sus productos.
El punto de partida se puede situar en la plaza de La Marina. Allí copan un espacio Madrid es queso. Rubén Fernández de la Quesería Jaramera y Javier Garnacho, de Vega Alberche al Vino hablan con los zamoranos que se acercan al stand. Se estrenan en esta cita mundial del queso para dar a conocer sus productos galardonados en la Comunidad de Madrid. Este año, Rubén se ha hecho con el premio al Mejor Semicurado de Oveja de Madrid, un queso que aparece dibujado con unas rayas negras. “Se llama queso mentiroso. Tiene unas capitas de menta dulce en el interior, no lo vas a encontrar en ningún sitio de la feria”, apunta Rubén. Su vecino, Javier ha sido galardonado por tener el Mejor Queso de Mezcla. “Es un queso de coagulación mixta, es decir, con pasta blanda, cuya peculiaridad es que está lavado con vino con una uva garnacha tintorera”, describe.
Ambos queseros madrileños tienen una sonrisa en la cara, se lo están pasando bien en las primeras horas de la feria, aunque reconocen que la mañana del jueves ha sido un poco “floja” porque solo han pasado “los chicos del instituto y los jubilados”, pero por la tarde se ha ido animando después de que “los trabajadores hayan finalizado su jornada laboral”.
Compañeros de la profesión de Rubén y Javier han repetido en esta segunda edición de Fromago, lo que significó un impulso para ellos. “Si repiten es por algo. En la Comunidad de Madrid no sobran queseros y las ferias no tienen tanta tradición como en Castilla y León o Navarra, entonces hay que hacer un esfuerzo y venir a estas citas”, confiesa Javier de Vega Alberche al Vino.
Quesos de chorizo o de jamón ibérico de bellota
Unos stands más adelante, también en La Marina, una clienta comenta a Carmelina Preteltl y Lina Mendoza Preteltl cuáles son sus gustos. “A mi me gustan los quesos flojitos, que no sean tan fuertes”, comparte la clienta en la carpa de Queso Idiazabal Aumitz de Álava. Madre e hija también se estrenan en Fromago. Han estado en las ferias de Valladolid y Salamanca, pero ahora llegan a Zamora por sus buenas referencias. Sobre los quesos que tienen en su escaparate destacan que son elaborados con leche de oveja ahumado a la antigua usanza en una caseta. “El pastor que los elabora es un maestro quesero y soy yo la que salgo a vender sus productos”, dice Carmelina. Su queso es de Denominación de Origen y, como apunta, está catalogado como uno de los mejores de España.
En esta segunda edición madre e hija esperan irse “con las cajas vacías” porque eso significaría que lo han vendido todo. “Sé que se venderán porque cuando llevas un buen producto, sabes que la gente lo va a comprar”, sostiene Carmelina, quien ya piensa en repetir si hay una tercera edición. “Me gustaría volver a repetir la experiencia”.
Seguimos paseando por el centro de la ciudad y hacemos parada en la Plaza de la Constitución donde se encuentra El Señorío de Monesterio. Domingo Vino corta con precisión y concentración un queso de chorizo. “Está buenísimo, pruébalo”, dice. Sus quesos llegan desde Badajoz. “Tenemos queso de jamón ibérico de bellota. Todos son artesanos de cabra sin ningún tipo de aditivo y las cortezas son comestibles”, dice Domingo presumiendo de su medalla de plata en los Premios Cincho de Oveja. “Nunca había venido y estoy viendo que la gente es muy buena y esta todo bien organizado. Espero venderlo todo”, se despide mientras sigue cortando su llamativo y delicioso queso de chorizo.
Iñaki Xalabarde y sun don para atraer a los zamoranos a su stand de Buleri
El salero que tiene Iñaki Xalabarde hace que todos los clientes se acerquen a al stand Buleri de Cádiz en la Plaza Mayor. Dos clientes se llevan su llamativo queso negro. “He traído cinco quesos: queso de lunares, queso de manteca colorada, queso al pesto, queso al Pedro Ximénez y este queso negro que se llevan los clientes”, señala.
Este tipo de queso que llama la atención y que ya está en alguno de los hogares de Zamora está elaborado con leche de cabra y vaca, con tinta de sepia y especias. Además, está embutido con tripa natural. “Es un queso creativo y de los más punteros de la Feria. Muchos se piensan que es un queso francés o italiano, pero no es así. Soy diseñador de productos gastronómicos y este queso se lo he vendido a personas de Nueva Zelanda, Tailandia, Estados Unidos o Sudamérica”.
Iñaki nació en Zamora, aunque ha vivido toda su vida en Bilbao. Desde Buleri, empresa gaditana, reivindica la Feria de Fromago y la ciudad de Zamora. “A las ferias y a los mercados a los que voy, digo a mis compañeros que tienen que venir a Zamora porque es espectacular. La ciudad necesita este tipo de ferias. Espero que sea un 20% mejor que la del 2022 y que vengan todos aquellos que se quedaron con ganas de acudir a la primera edición”, señala Iñaki abordado por sus clientes para degustar su queso negro untado en un pequeño panecillo tostado.
Empresas queseras de Madrid, Álava, Badajoz y Cádiz se han dado cita en Zamora. En cada stand de la feria se esconde una historia quesera. Este Fromago 2024 solo acaba de comenzar, pero está siendo tan intenso que el trasiego de las personas y coches no cesa. Son días especiales en los que el queso es el protagonista, pero también los queseros y queseras que atienden con dedicación a sus clientes. Nunca se sabe si el queso que se ha adquirido en Fromago será el nuevo producto favorito de quien los compra.
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