Tars la sesión plenaria celebrada en la tarde de este lunes en el Ayuntamiento de Zamora, el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha comparecido para valorar la situación tras el derrumbamiento del muro de Rabiche, que motivó el desaolojo de un total de 10 viviendas, que se vieron afectadas por el desplome. Confirmaba Guarido que la obra de reparación comenzará a primera hora de la mañana de este martes y ha sido declarada "de urgencia".
Aseguraba Guarido que "no hay constancia de que alguien se haya quejado alguna vez de que el muro estaba en malas condiciones", aunque matizaba que eso "no quiere decir, y además da lo mismo, que no se haya dicho verbalmente en 45 años que tienen las viviendas". "Más rápido no se puede actuar", manifestaba Guarido. El primer edil no ha dado una fecha para el final de la obra, aunque ha asegurado que se solventará en varias semanas.
En este sentido, insistía en que "el Ayuntamiento ha actuado con diligencia, ha sido ágil y empezar esta obra mañana a las ocho de la mañana es un éxito después de la desgracia que hemos tenido". La obra, para que el Ayuntamiento "no escatimará en gastos", se realizará en dos fases fundamentales.
La primera fase consistirá en retirar las 300 toneladas de hormigón desplazadas sobre las viviendas. Esta retirada se realizará a través de una parcela colindante, vacía, que permitirá la llegada y tránsito de la máquina y los camiones de alto tonelaje. Confimaba Guarido que "mañana se firmará la autorización por escrito, y hay que agradecerle la disposición al propietario".
La segunda fase, una vez retirado el hormigón, será rehacer el muro "para que las viviendas tengan una situación sin complicaciones para siempre". Sobre esas viviendas, aseguraba Guarido que, "con ayuda de las tres arquitectas y los dos ingenieros del Ayuntamiento", han entrado y han estado valorando posibles soluciones. Y es que las viviendas "en términos generales, están bien, la situación era mejor de lo que esperábamos".
Sobre los vecinos, confirmaba el alcalde que "no podrán entrar en las viviendas mientras el muro siga presionando como está ahora mismo sobre la estructura de las viviendas". "Hasta que el muro no esté hecho al menos en un tercio, no podrán entrar", añadía. "La obra va a ir a toda velocidad en lo que técnicamente sea posible", aseguraba.
Desde el Ayuntamiento, manifestaba el alcalde que "se está dando una solución global". "Si alguien nos trae un contrato de alquiler, tiempo máximo que estamos pensando, que esperemos que no se alcance, a un precio razonable, lo pagarían los servicios sociales del Ayuntamiento", anunciaba también. "En estos primeros tres o cuatro días hasta que se tomen las decisiones globales satisfactorias para todos, vamos a permitir soluciones de hotel", explicaba.
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