El curso, de casi dos meses de duración e impartido según el estándar de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), ha permitido enseñar a los agentes normativa aeronáutica, conocimiento general de aeronaves, procedimientos aeronáuticos, servicios tránsito de aéreo o comunicaciones avanzadas.
El acto de clausura ha sido presidido por el jefe de la Jefatura de Fiscal y Fronteras/Inmigración de la Guardia Civil, el general de división Juan Luis Pérez Martín y el vicerrector de Relaciones Internacionales de la Universidad de Salamanca, Efrem Yildiz. Los cerca de 200 efectivos han superado con éxito la formación en drones que ha impartido la Universidad a través de su centro adscrito, la Escuela Aeronáutica Adventia.
Los agentes de la Benemérita que han participado en este curso forman parte de los denominados equipos PEGASO (Policía Especialista en Gestión Aeronáutica y de Seguridad Operacional), especializados en el control policial del espacio aéreo en la aviación general y que se encuentran ya desplegados en toda la geografía española.
Junto a las labores de vigilancia de campos de vuelo, helipuertos, aeropuertos y pistas de emergencia, estos equipos son responsables de la prevención y el control de incidentes con aeronaves remotamente pilotadas (drones) para lo que han recibido esta novedosa formación impartida por la Escuela de Pilotos Adventia.
Los equipos PEGASO son una iniciativa pionera a nivel mundial, en tanto en cuanto hoy por hoy constituyen las únicas unidades policiales creadas ad hoc para el control policial de la aviación ligera y los drones.
Además, su formación sigue las recomendaciones marco de Interpol ante incidentes con drones, situando a la Guardia Civil como un referente único en el contexto europeo e internacional en la lucha contra los delitos aeronáuticos.
Estos equipos dependen del Mando de Fronteras y Policía Marítima, creado recientemente en el seno de la Guardia Civil por el Ministerio del Interior para dar un impulso a la respuesta integral en materia de seguridad en el ámbito de los espacios fronterizos, en general, y en el marítimo en particular, frente a los nuevos retos y amenazas, entre los cuales se encuentra el uso de drones.