Hace escasamente un mes saltaba a la luz la detención en Salamanca de un hombre que trataba de extorsionar a las farmacias que dispensaban medicamentos sin recetas y les amenazaba con denuncias si no contrataba sus servicios.
Estos medicamentos eran entre otros, los referentes al Ibruprofeno a partir de 600 mg, así como el Paracetamol de 1 gramo o el Omeprazol a partir de 20 mg, que desde 2015 se deben dispensar siempre con receta, según la Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos, pero que se seguía vendiendo sin ella.
Pues bien, el Gobierno pretende ser más estricto al respecto y endurecer su vigilancia a través del Sistema Español de Verificación de Medicamento, ya puesto en marcha, y que permite controlarlos a través de un código.
De esta manera, la pretensión es que se cumpla la Ley y todos los medicamentos que requieran de receta sean dispensados a través de esta poniendo elevadas multas para que no la cumpla. De hecho, el Gobierno estipula una sanción de mínimo 30.000 euros, al considerarse como una infracción grave.