Según la nueva orden, que entra en vigor este mismo domingo 3 de mayo, se podrá retomar la actividad de las obras siempre y cuando "no se produzca interferencia alguna con las personas no relacionadas con la actividad de la obra", es decir, con los vecinos.
También se permiten "aquellas obras que se realicen en locales, viviendas u otras zonas delimitadas del edificio no habitadas, o a las que no tengan acceso los residentes mientras duren las obras".
Para poder retomar la actividad, se limitará la circulación de trabajadores y materiales por zonas comunes no sectorizadas, y se adoptarán todas las medidas oportunas para evitar, durante el desarrollo de la jornada, el contacto con los vecinos del inmueble.
Además, la entrada y salida al inicio y fin de la jornada queda regulada y los trabajadores tendrán que adoptar las medidas de prevención e higiene frente al COVID-19 indicadas por las autoridades sanitarias.