Día de despedidas y de emociones en el salón de actos de la Medalla Milagrosa. Los alumnos nacidos en el 2000 se despedían este viernes de su etapa en el centro. No han faltado las palabras de agradecimiento por parte de alumnos, padres y profesores que hoy ponían punto y final a quince años de enseñanza.
Llegaba el momento de decir adiós y los alumnos lucían ya la beca al cuello y la ilusión en la mirada con los ojos puestos en el futuro que les espera. Un futuro que todo el auditorio les deseó que fuese bueno y lleno de sorpresas y de errores de los que aprender.
Bajo la atenta mirada de la imagen de la Milagrosa, los más de cuarenta alumnos han vivido su día grande que sienta las bases de sus devenires futuros educativos o formativos.