La presidenta del CONCYL-Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León, Raquel Martínez, ha señalado que la incorporación de Asturias es un hecho especialmente relevante, teniendo en cuenta que es “territorio limítrofe a Castilla y León y que el desplazamiento de ciudadanos de una Comunidad a otra en épocas vacacionales es elevado. De ahí la importancia de que otras Comunidades limítrofes, como Madrid o País Vasco, se incorporen cuanto antes a esta red interoperable”.
Este sistema conectado permite por tanto a los ciudadanos retirar su medicación en cualquiera de las oficinas de farmacia de las 11 Comunidades Autónomas que ya son interoperables. Desde su puesta en marcha el pasado mes de junio y hasta finales de noviembre, son ya 34.159 las recetas electrónicas que se han tramitado en las 1.629 farmacias de Castilla y León procedentes de ciudadanos llegados de otras Comunidades Autónomas.
Mientras tanto, en ese mismo periodo, otras Comunidades interoperables han tramitado 27.226 recetas electrónicas de ciudadanos de Castilla y León. Los beneficios que la interoperabilidad trae consigo son indudables, tanto para los pacientes como para los profesionales sanitarios.
Por un lado, facilita el acceso a los tratamientos de los pacientes que no se encuentran en su Comunidad y permite al farmacéutico el seguimiento de dichos tratamientos. Todo esto con la vista puesta en mejorar la adherencia terapéutica y contribuir a la seguridad del medicamento a través de la detección de posibles reacciones adversas e interacciones.