El Pleno de este miércoles del Ayuntamiento de Zamora ha tenido como uno de los ejes centrales la aprobación de la reubicación de las plazas de zona azul. A tenor del Plan de Movilidad Urbana Sostenible y las acciones de peatonalización y "calmado de tráfico”, el equipo de Gobierno ha apostado por reordenar el tráfico en el centro de la ciudad, moviéndose la zona azul a los alrededores de la plaza de Toros.
En contra de la propuesta, la representante de Ciudadanos, María Cruz Lucas, expuso que desde su formación no entienden “las prisas y rapidez del equipo de Gobierno para aprobar este asunto”, reclamando la retirada de este punto del orden del día y preguntando para quién es positiva esta reordenación de la zona azul.
Propuesta que, tal como ha señalado la concejala, cuenta con informes técnicos “desfavorables” y que llega al Pleno de manera “apresurada” sin hacer una consulta pública previa. “Se evitan tener que dar explicaciones a nadie”, recalcó Cruz Lucas, reiterando que el equipo de Gobierno huye “una vez más” del “diálogo y del consenso” y denunciando la apuesta por el “rodillo” de la mayoría.
La postura socialista, trasladada por David Gago, no fue tan crítica y resaltó su “apoyo hacia el nuevo planteamiento de movilidad urbana” en la zona del centro de la ciudad, no así considerando la propuesta “la mejor idea posible”, especialmente por su procedimiento de prescindir de la consulta pública previa.
“Debería ser una cuestión de voluntad política”, recalcó Gago, cuestionando “dónde está el planteamiento” que le hacía Izquierda Unida al Partido Popular cuando estos estaban en el Gobierno. Por ello, la formación socialista exigió a Izquierda Unida que comenzase de nuevo con la retirada de la ordenanza y proceda a escuchar a los zamoranos a través de la participación ciudadana. “No vamos a votar a favor de una ordenanza que no está sometida previamente al informe público”, concluyó el concejal socialista, antes de preguntar en el turno de respuesta si en el modelo de ciudad que tiene Izquierda Unida únicamente entran los concejales de IU.
Mayte Martín Pozo también mostró su rechazo a la propuesta, sumándose a los otros dos grupos de la oposición del Ayuntamiento. La representante popular puso en el punto de mira la ausencia de diálogo con los ciudadanos y resaltó la política de “rodillo” del equipo de Gobierno.
Desde el Partido Popular han registrado un total de tres enmiendas en la Comisión de Hacienda, la primera de supresión para acabar con toda la zona 10; una de adicción referida al artículo 22 respecto a la condición de residente buscando añadir a los vecinos que residan en calles aledañas y la última, de modificación, buscando eliminar el número de autorizaciones de comercio para que no sea uno y puedan ser tramitadas para los distintos trabajadores.
Como respuesta, Miguel Ángel Viñas, concejal de Izquierda Unida, resaltó que se está “tratando de generar una opinión distorsionada” respecto a la propuesta. Viñas también respondió a las peticiones de trasladar la iniciativa a la consulta pública, dejando claro que “ahora se le va a explicar” al ciudadano a través de este acuerdo la propuesta y que contarán con un mes para hacer las propuestas pertinentes.
Por último, el propio Francisco Guarido tomó la palabra y resaltó el “rigor” de la propuesta de su equipo, recalcando que un informe destaca que “no es necesaria la consulta previa”. El alcalde también sacó pecho por el trabajo de transparencia en el Ayuntamiento, resaltando la labor de su mandato.
Este punto del orden del día contó con los votos a favor de los 13 concejales de Izquierda Unida y con la desaprobación del resto de grupos, saliendo adelante gracias a la mayoría con la que cuenta IU en este mandato. Asimismo, se rechazó el dejar sobre la mesa la propuesta para estudiarla posteriormente, así como las diferentes enmiendas presentadas por el Partido Popular.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios