Con la puesta en marcha de estas nuevas medidas la Junta de Castilla y León se anticipa, ante la situación de desaceleración económica, y pone en marcha medidas nuevas de apoyo al asentamiento del tejido empresarial, en particular orientadas a mantener e impulsar la inversión creadora de empleo y a contribuir a crear un entorno más favorable para las empresas de la Comunidad.
Rebaja del precio de suelo para la inversión empresarial
El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fdez. Carriedo, ha informado que la Junta de Castilla y León ha aprobado una rebaja del 25 % de media en el precio del suelo empresarial promovido por la Consejería de Economía y Hacienda en la Comunidad. La puesta en marcha de esta medida supondrá un ahorro potencial de 23,1 millones de euros en inversión de suelo para los nuevos proyectos empresariales y para la consolidación y la ampliación de los ya existentes.
La superficie de suelo a la que afecta esta medida asciende a 3,8 millones de metros cuadrados. Con la aplicación de esta medida, se produce una bajada media en el precio del suelo empresarial disponible del 25 %, que incluye el suelo empresarial en los Planes Territoriales de Fomento. Si no se tuvieran en cuenta las bonificaciones derivadas de los Planes Territoriales esta rebaja se situaría en una media del 17,6 %.
Ayudas para la reactivación económica
Además de la reducción del precio del suelo empresarial, se ha puesto en marcha una nueva línea de apoyo financiero dentro del programa ADE Financia 2019 a través de Iberaval, que tiene como objetivo impulsar la reactivación económica en la Comunidad. Tiene como finalidad favorecer que las empresas continúen desarrollando su actividad y acometan nuevos proyectos de inversión o ampliación y creen más empleo en suelo empresarial de Castilla y León.
El objetivo concreto de esta nueva línea de actuación es la financiación de proyectos de inversión y necesidades de capital circulante de empresas que generen actividad, mediante inversiones materiales o circulante que impliquen generación y mantenimiento del empleo, con un importe de crédito entre 6.000 y 700.000 euros, un plazo de amortización entre 12 y 120 meses, una carencia de hasta 24 meses y una bonificación total máxima del 2,5%.