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La Diócesis de Zamora organiza una peregrinación a Santiago para jóvenes de 16 a 30 años

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El Secretariado Diocesano de Pastoral Vocacional ha organizado como actividad para este verano la peregrinación por el último tramo del Camino Francés a Santiago de Compostela. Tendrá lugar del 4 al 10 de julio y aún está abierto el plazo de inscripción para chicos y chicas de 16 a 30 años.

Con el lema “Sigue las flechas del Camino”, sus organizadores pretenden ayudar a los jóvenes participantes a encontrar su vocación: “la experiencia nos dice que el Camino Jacobeo es un tiempo privilegiado para encontrarse con uno mismo y, partiendo de este encuentro, provocar un movimiento de salida hacia los demás y especialmente hacia Dios, quien habita en lo más profundo del corazón humano”.

Durante la peregrinación, se caminará por las mañanas, y las tardes de dedicarán a actividades en las que los peregrinos se repartirán en dos grupos, por edades. Como explica Florentino Pérez, director del Secretariado de Pastoral Vocacional, “se trata de una actividad que busca plantear un tiempo intenso de convivencia, reflexión sobre la propia vocación y tiempos de oración”.

Las plazas son limitadas, ya que el número máximo de jóvenes será de 50. La inscripción está abierta hasta el próximo 30 de junio, y el precio total de la peregrinación es de 190 euros por persona (incluyendo la pensión completa en albergues privados y los viajes de ida y vuelta a Zamora). Para divulgar la actividad y, posteriormente, compartir la experiencia vivida, se ha creado una página web, www.siguelasflechasdelcamino.com, donde es posible inscribirse directamente.

Escucha e interioridad

Según informa la página web, la peregrinación abarcará las últimas cinco etapas del Camino Francés: Sarria – Portomarín – Palas de Rei – Arzúa – Pedrouzo (Rúa) – Santiago de Compostela. El Secretariado de Pastoral Vocacional especifica que “no es una ruta turística, sino una experiencia de profundización en la propia identidad”, y por ello “será fundamental contar con un tiempo de silencio absoluto (una hora) en cada jornada de camino”.

Por otro lado, señalan que “no es una experiencia light”, sino que este camino “engorda la propia interioridad; la capacidad de escucha; la experiencia personal y comunitaria de Dios. También provoca grandes deseos de ayudar a los demás y de comprometerse con una transformación del mundo”. Y a modo de navegador GPS, se propone a los jóvenes participantes: “podrás descubrir cuál es el proyecto de vida que encaja contigo desde lo que Dios sueña. Se trata de encontrar tu lugar en el mundo y en la Iglesia”. 

En la presentación de la web, los organizadores de la peregrinación terminan dirigiéndose así a los posibles interesados: “sólo nos queda desearte buen camino y pedirte que estés atento o atenta a las flechas que te irán conduciendo hasta la meta de tu vida. Ultreia!”.

Padrinos solidarios

Un aspecto propio con el que se ha querido contar en esta peregrinación juvenil es la solidaridad, ya que “el Camino de Santiago es una experiencia que ayuda a cada peregrino a salir de sí mismo para encontrarse con los demás. Peregrinar equivale a salir de los propios intereses, de la comodidad cotidiana y de los planteamientos superficiales”. Por ello, sus organizadores afirman que “el Camino de Santiago siempre nos abre a una experiencia de solidaridad y compromiso”.

De esta manera “se está creando un banco de empresas, organismos, instituciones y personas particulares que desean apadrinar a un peregrino”, algo que “implica ofrecer un donativo económico por kilómetro caminado hasta Santiago de Compostela (116 km). El mínimo del donativo será de 1€, sin que exista límite en el máximo. La cantidad se establecerá por acuerdo entre la entidad donante y el peregrino hasta un día antes de empezar el Camino (4 de julio)”.

El dinero recaudado “será destinado a la obra caritativa o social que cada uno de ellos determine en diálogo con la entidad donante” y se ofrecerá un banco de ONGs y proyectos de promoción humana para poder elegir. La entrega de la cantidad económica la realizará el propio peregrino, “juntamente con el compromiso personal de incrementar en adelante su vinculación efectiva y afectiva con el proyecto financiado”.

Para formar parte del banco de entidades y personas donantes que desean apadrinar un peregrino, se deberá enviar un correo electrónico a vocaciones@diocesisdezamora.es indicando el nombre de la entidad o persona donante, un teléfono de contacto y los motivos por los cuales desea apadrinar a un peregrino. Las entidades y personas donantes podrán optar por que se haga público su apadrinamiento a través de diferentes medios de comunicación, o bien mantenerse en el anonimato.

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