Los Juzgados de lo Social de Castilla y León resolvieron 1.121 despidos individuales durante el tercer trimestre del año, lo que supone un aumento del 53,8 por ciento, respecto a los 729 del los mismos meses de 2019, tras la parálisis de su actividad durante el estado de alarma.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) explicaron a Ical que “se puede adivinar lo que viene” por la crisis social generada por la pandemia, pero indicaron que aún se están computando las cifras de ingresos y “habrá que esperar a ver hasta dónde llega esto”. El presidente del TSJCyL, José Luis Concepción, ya advirtió a comienzos de julio, cuando presentó la memoria judicial de 2019, del “riesgo de colapso” y exigió más medios para hacer frente a una posible avalancha de asuntos.
Las mismas fuentes comentaron a Ical que, de momento no hay peticiones concretas de los juzgados, pero Burgos, Salamanca y Segovia presentan los peores datos “porque arrastran un problema estructural” y la COVID “agrava su situación”.
Las cifras que facilita el Ministerio de Trabajo y Economía Social, indican que 291 de los despidos que acabaron en los tribunales, se resolvieron en el tercer trimestre con sentencia favorable al trabajador, y 539 por conciliación.
Los trabajadores con sentencia favorable aumentaron un 37,9 por ciento; con unas cantidades acordadas por 3,61 millones, que representan un aumento del 67,3 por ciento. La cuantía media se situó en los 12.427 euros por trabajador despedido, un 21,3 por ciento más que un año antes.
En cuanto a los despidos resueltos por conciliación, 539, crecieron un 62,3 por ciento en el tercer trimestre, respecto a los mismos meses de 2019; con unas cantidades pactadas por 4,75 millones, que subieron un 27,3 por ciento. La indemnización media, sin embargo, se desplomó un 40,9 por ciento, hasta los 8.961 euros.
Los conflictos colectivos resueltos también se dispararon, con 35 en el tercer trimestre frente a los 15 de 2019; y crecieron un 15,4 por ciento en el acumulado del ejercicio, hasta los 75.
Situación contenida en el acumulado
La situación aún no se ha disparado, contenida la sangría laboral por las medidas del Gobierno de apoyo a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) y las limitaciones a los despidos durante la pandemia, aunque el alcance real de la crisis se dejará notar en toda su crudeza durante los próximos meses, a la espera de que se recobre cuanto antes la normalidad gracias a la vacuna.
En este sentido, en los nueve primeros meses del año, la cifra de despidos resueltos fue inferior a la del pasado ejercicio entre enero y septiembre, 2.466, un 16 por ciento menos, tras los tres meses de cierre de la actividad.
Los despidos con sentencia favorable y conciliación afectaron a 1.804 trabajadores entre enero y septiembre, un 17,5 por ciento menos que en 2019. Las cantidades acordadas sumaron 17,88 millones, con una merma del 38,6 por ciento; y la cuantía media por trabajador se situó en los 9.916,5 euros, con una reducción del 25,6 por ciento.
Otros asuntos
Asimismo, la resolución de otro tipo de asuntos que llegan a estos juzgados se contrajo respecto a los datos del año pasado. Las reclamaciones derivadas del contrato de trabajo bajaron en el tercer trimestre del año un 25,2 por ciento, con 988; y un 38,5 por ciento en el acumulado del año, hasta las 3.514. Los asuntos resueltos sobre la Seguridad Social, 575 en el tercer trimestre y 1.969 en los nueve primeros meses, cayeron un 25,8 y un 41,8 por ciento.
Las reclamaciones de cantidad con sentencia favorable al trabajador disminuyeron un 55,6 por ciento de enero a septiembre, con 935; las cantidades reconocidas se contrajeron un 68,1 por ciento en ese periodo, con 2,9 millones; y la cuantía media bajó un 28,2 por ciento, hasta los 3.178,9 euros. En el tercer trimestre, los asuntos bajaron un 54,6 por ciento (210); la cuantía global un 62,4 por ciento (682.455 euros); y la media un 17,1 por ciento (3.249,8 euros).
Estos casos resueltos por conciliación, se redujeron un 22,7 por ciento en nueve meses, con 697; la cuantía global pactada sumó 2,94 millones, un 42,6 por ciento menos; y la media por empleado, 4.228,3 euros, con una merma del 25,7 por ciento. Los datos para el tercer trimestre indican una reducción de los casos por conciliación de un 3,1 por ciento (187); una merma de las cantidades reconocidas del 43,1 por ciento (534.888 euros); y un descensos de la media lograda por empleado del 41,3 por ciento (2.860,4 euros).