Una semana después de que DAZ emitiera el comunicado sobre la decisión de no firmar el convenio de colaboración para la gestión de colonias felinas, se publicó la información de que el propio Ayuntamiento de Zamora “continuará gestionando las colonias de la ciudad”. A juzgar por el revuelo observado a través de las redes sociales y por los muchos mensajes y llamadas que la asociación ha recibido durante estos días, la comunicación de la respuesta oficial se había hecho esperar y tampoco ha terminado de convencer ni de contentar a un buen número de ciudadanos. Tanto la abrumadora respuesta de la ciudadanía a la emisión del comunicado como algunos de los puntos publicados por el Ayuntamiento, han llevado a la Junta Directiva de DAZ a informar de nuevo sobre la cuestión.
En el comunicado emitido el pasado día 20 de enero, DAZ se limitó a relatar los hechos acontecidos de forma objetiva y a informar de su postura a los ciudadanos de Zamora, sin acritud ni ánimo de hacer críticas destructivas contra nadie. La respuesta a la publicación fue tratar como mentirosos a los miembros de la asociación. Por principios, por dignidad, por respeto a los muchos años de duro y eficiente trabajo voluntario (reconocido esto públicamente por el Consistorio y por el Coordinador de Área Romualdo Fernández), procedemos a completar y desmentir parte de lo publicado por el Ayuntamiento de Zamora, así como lo relatado por la Concejala de Salud Pública, en declaraciones a los medios de comunicación locales.
La Concejala Carmen Turiel, quien rechazó reunirse con miembros de la Junta Directiva de DAZ para hablar sobre la situación que habíamos conocido indirectamente de la captura de gatos de colonia en el cementerio y su traslado al Centro Municipal de Recogida de Animales (comúnmente conocido como “perrera”), declaró sin ningún tipo de tapujo que DAZ miente. Sin embargo, cuando en octubre nos enteramos de que se habían capturado gatos en la colonia del cementerio, no solo se nos confirmó esta información, sino que además supimos que se trataba de cinco animales y que se encontraban en la perrera municipal, excepto uno que nos reconocieron que se les había escapado en el traslado. Por otra parte, el Coordinador de Área, Romualdo Fernández, nos corroboró en diciembre que es cierta la información de que los gatos habían sido capturados. La diferencia entre las versiones de ambos responsables municipales se hace patente consultando la información publicada por la prensa digital local, llegando a hablar uno sobre la problemática con la colonia del cementerio y lo sucedido con la misma (Zamora3.0 – 21/01/20), mientras que el otro niega que dicha colonia exista y expresa que DAZ quiere “realizar” una colonia allí (Zamora24horas – 21/01/20).
Otra de las afirmaciones hechas por la Concejala de Área fue que todo esto se trata de un “berrinche” de DAZ. ¿De verdad alguien puede creer que una asociación de defensa animal que lleva luchando por la implantación del método CES en Zamora durante nada más y nada menos que 7 años, va a abandonar todo por capricho? No tiene ningún sentido para los socios de esta asociación ni para las diferentes juntas directivas que la han gestionado rechazar por una simple pataleta el convenio de gestión por el que se ha trabajado desde 2012. Nuestra labor es seria y se realiza con mucho esfuerzo. El camino se inició con la creación, junto a otras asociaciones y particulares de Castilla y León, de la Plataforma “Gatos en la calle”. En 2013, con Rosa Valdeón al frente del Ayuntamiento, se mantuvo una primera reunión. En la siguiente campaña electoral, la mayoría de partidos políticos incluyó en su programa la implantación del plan CES (Captura – Esterilización – Suelta). En 2017, con Francisco Guarido en la Alcaldía de la ciudad, se firmó por primera vez un convenio de colaboración con el Ayuntamiento para implantar la gestión ética de colonias felinas utilizando el método CES. ¿Realmente creen que todo este esfuerzo, este trabajo inmenso, lo daríamos por terminado, a causa de un berrinche? Les respondemos: claro que no. Ahora bien, tenemos principios, una marcada ideología y también dignidad, que es lo que nos queda tras años trabajando sin descanso, poniendo nuestro tiempo, desvelos, dinero e ilusión.
Consideramos que hay varios aspectos básicos sobre los que el Ayuntamiento no ha informado o ha informado de forma incompleta a la ciudadanía en sus declaraciones y publicaciones:
- Uno, el llamado “efecto vacío”: sacrificar toda una colonia o llevársela de un lugar a otro (reubicación) provoca que el sitio que queda libre pueda ser ocupado por otros gatos. Si el lugar había sido habitado por gatos, es porque éstos habían encontrado en él las condiciones necesarias para vivir; es decir, refugio y, allí o en las proximidades, alimento. La existencia de estas condiciones propiciará que otros gatos, con diversos orígenes, terminen ocupando nuevamente ese hábitat. La gestión ética de colonias felinas debe ser integral y contemplar todos los factores que influyen en la presencia de gatos en un determinado lugar.
- Otro, la cuestión de las zoonosis, definidas por la Directiva 2003/99/CE como “cualquier enfermedad o infección transmisible de manera natural entre los animales y las personas, directa o indirectamente”. Se ha aludido por parte de los responsables municipales a que la colonia felina del cementerio supone un “riesgo de salud pública” (página web del Ayuntamiento de Zamora – 27/01/20), sin distinguir entre lo que es posible y lo que es probable, sin ahondar en la temática, que consideramos que es importante y cuya desinformación o información solo parcial puede generar alarma entre la población y un rechazo injustificado hacia la presencia de gatos en la calle e incluso acarrear consecuencias fatales para estos animales.
- En tercer lugar, que la gestión ética de colonias felinas no solo consiste en implantar el método CES. Las esterilizaciones, que en estos tres años de colaboración han sido sufragadas con el dinero público aportado por el Ayuntamiento, son solo la punta del iceberg de todo lo que implica esa gestión. El trabajo realizado por DAZ, con sus propios recursos, ha incluido también:
.- Acudir a avisos de gatos heridos, enfermos, atropellados, atrapados en motores de coche o en tejados de edificios y todo tipo de situaciones similares que los ciudadanos se encuentran diariamente y por los que hasta ahora se ha recurrido al trabajo voluntario de la asociación, que siempre ha tratado de aportar soluciones en la medida de sus posibilidades, acudiendo presencialmente o proporcionando información por vía telefónica.
.- Mediar en conflictos generados por la presencia de gatos en las calles y diversos espacios públicos.
.- Atender a ciudadanos, alimentadores en particular, que han planteado dudas y necesidades tanto a la asociación como al propio Ayuntamiento, habiendo sido derivados al teléfono de la asociación.
.- Acoger y buscar y gestionar adopciones responsables para gatos recogidos de la calle en casos que han requerido hospitalizaciones o tiempos de reposo prolongados.
Llegados a este punto, recordamos y nos reafirmamos en los motivos por los que renunciamos a firmar la colaboración con el Ayuntamiento de Zamora para encargarnos de la gestión ética de colonias felinas en la ciudad:
- No consideramos que se pueda calificar como “ética” la captura de gatos ferales de su colonia, su traslado a las instalaciones del Centro Municipal de Recogida de Animales y su supuesta suelta en fincas. Nos preguntamos: ¿cuántos gatos se van a capturar para acabar con la colonia del cementerio? ¿Qué va a pasar si vuelve a haber algún problema con alguna otra colonia de la ciudad? ¿Se obrará de la misma manera? ¿Se va a volver a aludir a problemas de salud pública?
-Estimamos que la ausencia de comunicación con la asociación desde el Área de Salud Pública antes de proceder a la captura de gatos de colonia y la negativa de la Concejala de área a reunirse con miembros de DAZ para tratar la situación (una vez que, de forma casual, la asociación supo lo que estaba ocurriendo), suponen un incumplimiento por parte del Ayuntamiento del acuerdo verbal que se había alcanzado para que se nos informara por su parte sobre los posibles conflictos quepudieran surgir con los gatos de las colonias felinas para solucionarlos, como hemos hecho todas y cada una de las veces que así se nos ha demandado. Tal acuerdo sí se había cumplido hasta la captura, a nuestras espaldas, de la colonia de gatos existente en el cementerio.
- La sucesión de los hechos y las decisiones tomadas por las personas responsables del Área de Salud Pública, así como su rechazo sistemático a las alternativas que les planteamos para encontrar una solución ética, han generado una pérdida de confianza en los mismos, que dificulta enormemente la continuidad del trabajo de DAZ con el Consistorio si éste no muestra voluntad de cambio, en particular en lo referente a la gestión de la colonia felina del cementerio de Zamora.
Por añadido, ante los comentarios derivados de las informaciones publicadas, aprovechamos para aclarar que DAZ nunca ha tenido un interés particular por ser la entidad que lleve a cabo la gestión de colonias felinas ni se ha opuesto a que lo haga el Ayuntamiento con sus propios medios ni éste en colaboración con otras entidades. DAZ es una asociación sin ánimo de lucro: nuestra labor es totalmente desinteresada en el plano económico. El dinero público destinado a este convenio se ha empleado única y exclusivamente en la esterilización de los gatos. La asociación ha venido adelantando el dinero en estosaños de colaboración para pagar las esterilizaciones, hasta que el Ayuntamiento lo ha aportado. La reivindicación de la asociación ha sido, es y será, que la Administración atienda a los gatos de las colonias, puesto que se trata de un tema de responsabilidad municipal y de interés general. Esa atención ha sido durante estos años mediante la firma de los convenios de colaboración con DAZ en los términos acordados, pudiendo pasar a ser con otra entidad. En relación con esto, dudamos que ninguna entidad que se considere protectora de animales o defensora de los derechos de los animales no humanos admita la gestión de colonias felinas con un Consistorio que captura gatos ferales de espaldas a los criterios éticos que constituyen la base de todo esto.
Desde que emitimos el comunicado, DAZ ha seguido recibiendo avisos para atender a gatos que se encontraban en distintas situaciones, ante las cuales los servicios públicos no han actuado como los ciudadanos podían esperar. Si bien sí continuará nuestra labor particular como asociación, encaminada al cumplimiento de los objetivos contemplados en sus estatutos, esperamos que el número de teléfono de DAZ, asociación privada, sin ánimo de lucro, sin subvenciones ni ayudas públicas y sustentada en la labor de voluntarios, deje de aparecer en la página web del Ayuntamiento de Zamora entre los contactos de entidades que cobran por la gestión de servicios públicos relacionados con los animales abandonados, callejeros, etcétera. Puesto que no somos una Concejalía, ni la Policía Municipal, ni tenemos contratados el servicio de recogida ni la gestión de ningún centro destinado a la recogida de animales, nuestro contacto nunca debió aparecer en ese apartado de la citada web (Servicios > Salud pública y Sanidad > Salud pública > Información > Sanidad Animal > Centros de Recogida de Animales).
Estos días, muchos ciudadanos han proporcionado diversos ejemplos de gestión ética de colonias felinas en cementerios de otras ciudades al Ayuntamiento de Zamora. Destacamos aquí el caso de la colonia felina del cementerio San Carlos Borromeo, sito en la vecina Salamanca. Según las palabras de la primera teniente de alcalde, Ana Suárez (Ciudadanos): “La realidad es que en el cementerio hay gatos y tenemos que regular la colonia progresivamente para que sea un número asumible”. También expresa que “son gatos callejeros y difícilmente se pueden adaptar para estar en viviendas”.
Desde DAZ, nos alegramos de que la reacción ciudadana haya logrado, por lo menos, que los gatos no vayan a acabar metidos en jaulas. Ciudadanos, alimentadores y miembros e integrantes de la Junta Directiva de DAZ estaremos muy atentos a los próximos pasos del Ayuntamiento de Zamora para comprobar que se lleva a cabo la gestión de colonias felinas que los ciudadanos esperan: eficiente, transparente y, sobre todo, ética.