El Gobierno ha ordenado el cierre de los centros educativos de las comunidades autónomas, también de Castilla y León, para intentar poner freno al contagio por el Covid-19 y, aun así, los delegados de Prevención de Riesgos Laborales de CSIF de los distintos comités de empresa, están recibiendo las quejas del personal no docente que trabaja en los centros educativos, porque unos tienen que acudir y otros no, a pesar de que los alumnos no asisten. Los afectados son trabajadores de administración, conserjes, subalternos, o de servicios como limpieza. Así lo indica el sector de Administración General de la Junta (AGCYL) de CSIF en Castilla y León, que no entiende el establecimiento de distintas medidas a la hora de determinar los efectivos mínimos y las personas que deben acudir a trabajar los centros, según consideren los distintos equipos.
El 12 de marzo de 2020 CSIF solicitó al Ministerio de Educación que la prioridad absoluta para las decisiones políticas sea la salud pública, sin pensar en los costes que éstas puedan acarrear. En educación, las medidas tienen que ser de ámbito nacional, pues la propagación no entiende de fronteras. CSIF exige que la toma de decisiones que afecta a los centros educativos se establezca desde el Ministerio de Educación. Asimismo, solicita el cierre de los centros educativos,
“Demandamos que se haga de manera inmediata, no haciendo correr riesgos innecesarios al alumnado, docentes y demás profesionales no docentes por el miedo a los costes sociales de la medida”, remarca CSIF, que también ha solicitado que se contemplaran medidas telemáticas e informáticas para intentar paliar los problemas educativos de ámbito académico, que dicha medida podían acarrear. Por ello, CSIF ha solicitado al Ministerio de Educación que refuerce las plataformas on-line para garantizar la atención de los alumnos confinados.
Las instrucciones de la Dirección General de Recursos Humanos de la Consejería de Educación no son acertadas, y dejan abierto a los equipos directivos de los centros el número de trabajadores que debe acudir cada día al centro, sin que haya coordinación eficiente ante esta especial situación que estamos viviendo y manteniendo un riesgo totalmente innecesario, considera CSIF.
El sindicato independiente reclama que se den, de forma uniforme, las órdenes a los equipos directivos de centros educativos y responsables de escuelas infantiles. “No tiene lógica mantener los centros abiertos, máxime cuando en el RD 463/2020 por el que se declara el Estado de Alarma, se ordena la suspensión de cualquier actividad educativa presencial en todos los centros y etapas, y se señala que durante el período de suspensión se mantendrán las actividades educativas a través de las modalidades a distancia y on line, siempre que resulte posible”, se indica.
Por todo ello, CSIF solicita que se establezcan los mecanismos para el normal funcionamiento de la enseñanza a través de las plataformas on-line, implementando los medios suficientes de teletrabajo que permita que ningún empleado público, docente y no docente, tenga que exponerse al contagio del coronavirus más allá de lo técnicamente necesario.
CSIF añade que “en el caso de determinar la prestación del trabajo de manera presencial, se deberá garantizar la seguridad de los trabajadores a través de unas medidas preventivas acordes a la situación de riesgo del COVID-19, en cumplimiento de la normativa de Prevención de Riesgos Laborales”.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios