Tras el verano, la época de máximo peligro de incendios, llega el momento de la reflexión y en Zamora, a pesar de que este año no ha sido de los más dramáticos puesto que solo cabe recordar los incendios vividos en la Sierra de la Culebra en 2022 que han sido de los peores vividos en España, tampoco ha sido especialmente halagüeño y hay una gran preocupación que no cesa, el fuego provocado por los incendiarios, una lacra que permanece en la provincia.
Y es que en lo que llevamos de 2024 la provincia ha sido víctima de un total de 59 incendios que han arrasado un total de 1.166,15 hectáreas, una minucia si lo comparamos con aquel fatídico 2022, pero preocupante de nuevo si lo analizamos junto al año pasado, 2023, cuando se produjeron un total de 101 incendios que arrasaron únicamente 194,6 hectáreas.
Los incendios de 2024, al detalle
De los 59 incendios de los que ha sido víctima la provincia de Zamora en este año, cabe señalar que la mayor parte, hasta 34, han sido intencionados, por lo que la mano humana sigue siendo la que provoca los mayores desastres y, además, lo hace tristemente con esa intención.
Por su parte, otros 12 fuegos han tenido origen accidental, siete han sido fruto de negligencias, cuatro han sido provocados por rayos y hay dos con origen desconocido.
Además, del total de incendios hasta 38 se han quedado en conatos arrasando una superficie menor de una hectárea, mientras que otros 13 fuegos han calcinado entre 1 y 5 hectáreas, siendo los 8 restantes los que mayor superficie han destruido.
La superficie arrasada y los cinco incendios clave
Como ya avanzábamos, la superficie total arrasada en este 2024 es de 1.166,15 hectáreas. La superficie más afectada ha sido el matorral y el monte bajo, con 781,50 hectáreas quemadas, seguida del arbolado, con 263,53 hectáreas calcinadas y del pasto con 121,12 hectáreas arrasadas.
Lo más llamativo es que de la superficie total calcinada prácticamente la totalidad, hasta 1.089,27 hectáreas, proviene únicamente de cuatro incendios intencionados que han hecho cenizas 834,64 hectáreas y de un quinto de origen accidental que ha arrasado 252 hectáreas, sumando entre los otros 54 fuegos restantes apenas 76 hectáreas.