A pesar de que en los meses de invierno el número de desplazamientos en coche es menor, es en esta época del año cuando se producen un mayor número de accidentes al volante.
Aunque la lluvia es el fenómeno climatológico que más accidentes provoca, la nieve y el hielo también son causa de un gran número de siniestralidades.
¿CÓMO CONDUCIR CON NIEVE?
En época invernal la nieve se convierte en uno de los principales obstáculos a la hora de conducir. Por esta razón, la DGT recomienda seguir estas pautas para ayudar a reducir el riesgo de accidente:
1. Uso de cadenas
Si se tiene constancia de posibles nevadas es de vital importancia llevar cadenas o dispositivos similares en el maletero del vehículo. En caso de circular con cadenas, recuerda que la velocidad no podrá exceder de los 30 Km/h.
2. Llenar el depósito
Otra de las pautas que recomienda la DGT es llenar el depósito de gasolina cada vez que se viaje con nieve. Esto le dará más estabilidad al vehículo al pesar más y podra adherirse mejor a la carretera.
3. Llevar siempre las luces encendidas
Al igual que ocurre con la niebla, la nieve también disminuye la visibilidad en la calzada. Por esta razón, es conveniente llevar siempre las luces de cruce encendidas, incluso si es de día. En caso de que persista la poca visibilidad, se deben activar también las luces antiniebla.
Limpiar el parabrisas y los cristales del coche también ayudará a mejorar la visión de la calzada y del resto de vehículos.
¿CÓMO CONDUCIR CON HIELO?
Una humedad alta, el sol muy brillante o la presencia de zonas blanquecinas en la calzada son signos que detectan la existencia de placas de hielo, que suelen producirse entre la última hora de la noche y la primera hora de la mañana. Sin embargo, la DGT insiste en que no siempre es fácil visualizarlas, por lo que pide seguir los siguientes consejos:
1. Disminuir la velocidad
La posibilidad de que el coche se deslice con la presencia de hielo es mayor que con cualquier otro fenómeno meteorológico. En estos casos, lo mejor es disminuir la velocidad, frenar suavemente y, en la medida de lo posible, evitar los adelantamientos.
En caso de pisar una placa de hielo, se debe soltar suavemente el acelerador y girar despacio el volante. Si tienes que frenar, hazlo también con suavidad para no bloquear las ruedas.
2. Mantener la distancia de seguridad
Es de vital importancia mantener la distancia de seguridad con el vehículo que precede ya que, con hielo, la posibilidad de deslizamiento aumenta considerablemente.
3. No aproximarse a los interiores de las curvas
De esta forma evitaremos que el vehículo se acerque a las zonas donde existe una mayor concentración de hielo.