En agosto son muchas las familias que deciden pasar esta temporada estival en el pueblo. Realizar rutas de senderismo por el campo y las escapadas a la montaña, se convierten en una tónica habitual en estos días en los núcleos rurales.
En estas rutas es habitual encontrarse con perros mastines que están protegiendo el rebaño. Un perro de guarda y defensa de ganado, que por su tamaño y dócil comportamiento siempre ha sido el mejor aliado del pastor en la protección del rebaño contra animales como el lobo o contra cualquier otro intruso. Conocer un poco más sobre su función y cómo se comportan nos evitará algún que otro susto.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), con un anuncio para concienciar sobre estos animales y grabado en tierras zamoranas, ha detallado unas pautas a tener en cuenta y las cosas que debemos hacersi nos encontramos con uno de estos canes.
Cosas a tener en cuenta
Los mastines establecen un “perímetro de seguridad” contra depredadores y ladrones alrededor de su rebaño, que defenderán acercándose ladrando si te acercas más de la cuenta.
Con frecuencia se encuentran solos custodiando el ganado, especialmente en puertos de montaña. Esta es su función elemental. Además, conviven estrechamente con el ganado desde cachorros para verse como uno más. Aunque no veas al rebaño cerca, no están abandonados, ¡no te los lleves!
Muchos utilizan “carrancas”, unos collares con púas hacia afuera que disuaden al lobo en caso de un enfrentamiento entre ambos. No son collares de castigo, son legales y no suponen un maltrato animal.
Qué hacer
Si se te acercan ladrando, mantén la tranquilidad. Intentan ahuyentarte más que atacarte y si corres, gritas o haces movimientos bruscos se pondrán más nerviosos.
Aléjate con calma dando un rodeo. Si es posible, continúa por otro camino.
Si vas con tu perro, llévalo atado. Los mastines podrían pensar que se trata de un depredador y atacarle.
Si vas en bici, bájate y continúa a pie. Pueden interpretar tu tamaño y velocidad como una amenaza.
No te acerques a ellos ni al ganado. Llevarte una foto de recuerdo o darles de comer te puede costar un buen susto.
Siguiendo estos consejos disfrutarás del campo en todo su esplendor y pondrás tu granito de arena en la conservación de especies amenazas emblemáticas, como el lobo, ayudando al mantenimiento de la ganadería extensiva sostenible.