Cipriano García, director general de Caja Rural de Zamora, ofrecía este viernes los resultados del balance del año 2021. Unos resultados tremendamente positivos para la entidad y que han permitido un beneficio histórico de 27 millones de euros.
“Hemos tenido el compromiso y la responsabilidad suficiente para acometer las necesidades de socios y clientes, de empresarios y autónomos, de una forma eficiente. Todo a través del modelo de banca de proximidad y de relación cercana con el cliente. Porque la cercanía y el trato personal son los valores que priman como básicos y fundamentales”, explicaba Cipriano García, que apuntaba que los beneficios de la entidad “revierten directamente en la sociedad”.
Sobre la importancia que juega Caja Rural de Zamora en la provincia, que parece ser un oasis en una tierra deprimida, Cipriano García argumentaba: “Es un elemento más, un elemento participativo. Humildemente digo que sí es cierto que somos importantes y una parte de Zamora, aunque sigamos expandiéndonos fuera de nuestro entorno. Pero repito, somos un elemento más”.
Otro tema capital es el relacionado con los fondos europeos. En este aspecto, el director general de Caja Rural de Zamora entiende que son el último asidero que le queda a la provincia para salir de la situación en la que se encuentra: “Estamos pendientes de los fondos europeos porque es una oportunidad que no debemos dejar de aprovechar de ninguna de las maneras. Será una de las últimas oportunidades para engancharnos a una evolución positiva. Esperemos que sea el revulsivo necesario para mejorar”.
Es cierto que el modelo que sostiene Caja Rural es un modelo en ‘desuso’, dado que cada vez más son las entidades que cierran oficinas y se olvidan de la cercanía de los clientes. Pero Cipriano García lo defendía: “Es cierto que vamos contra el sistema, pero estamos expandiendo este plan y la evolución de la Caja acredita que el modelo funciona. Para nosotros es fundamental dar servicio de cercanía a clientes y empresarios. Ahora, según estamos viendo en los datos, recogemos los frutos de ese esfuerzo y esa dedicación”.
Uno de los datos que más llama la atención es que casi 9 de cada 10 hipotecas que se conceden en Zamora las otorga la Caja Rural de Zamora, lo que evidentemente deja poco margen de crecimiento: “Es un dato que refleja claramente nuestra filosofía de dar el máximo de servicios, potenciar todo lo que se pueda promover dentro de nuestro entorno. Zamora es nuestra esencia, estamos volcados para que haya una evolución positiva”.
Por último, hizo referencia a su respaldo al mundo rural: “Llevamos el apellido rural en el nombre. Somos gente de principios e intentamos no defraudar a nadie. El mundo rural es prioritario para nosotros porque es la esencia. En nuestro balance, el sector primario supone un 20 por ciento, lo que demuestra que somos multisectoriales”, zanjaba a la vez que confesaba que la inauguración esta semana de la oficina en la capital de España le generó una emoción visible, motivada en que “es un reflejo de un sentimiento de mucho tiempo”.