Los centros de Fisioterapia, Logopedia y Terapia Ocupacional continúan abiertos durante esta crisis y han notificado que no tienen las medidas sanitarias necesarias y que no pueden garantizar el no contagio de los pacientes o de sí mismos.
Algunos gobiernos regionales están de su parte pero debe ser el Gobierno quien apruebe el cierre. Las comunidades de Castilla La Mancha y La Rioja ya lo han conseguido pero el resto siguen luchando, incluido el colegio profesional de fisioterapeutas de Castilla y León.
El comunicado es el siguiente:
Ante la solicitud de todos los Colegios de Fisioterapeutas Autonómicos y en representación del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España, me pongo en contacto con usted para exponerle la situación a la que se enfrenta la profesión de Fisioterapia actualmente en nuestro país.
Nos encontramos ante una crisis sanitaria sin precedentes, tanto por el número de ciudadanos afectadoscomoporlaextraordinariaexigenciaparalosprofesionalessanitarios,cuyos tratamientos deben dispensarse con plenas garantías de seguridad y atendiendo a la necesidad PRIMARIA de revertir la curva de contagio.
Precisamente, en relación con este punto de eliminar toda vía de contagio posible, desde este CGCFE,le informamos que en la situación actual de alerta sanitaria por el COVID-19 no podemos garantizar una asistencia segura a nuestros pacientes ya que:
1.Nuestras intervenciones terapéuticas implican un contacto directo con el paciente, muy cercano y mantenido en el tiempo, de tal manera que se aumenta el riesgo de contagio entre el profesional y el paciente.
2.La gran mayoría de nuestros procedimientos terapéuticos se realizan ante procesos patológicosquepuedenserpospuestosporsucarácternourgente,evitandoasí contribuiralapropagacióndel Virusentrelosciudadanosqueasistena nuestros Centros, de otra forma, que el riesgo asumido por el desplazamiento y tratamiento es mayorqueelbeneficioquesepuedeobtenercon nuestrosprocedimientos terapéuticos.
3.El sector privado/liberal de nuestra profesión representa aproximadamenteel 90% del totaldenuestroscolegiadosy,enestecontexto,nodisponemosdematerialde protección para pacientes ni profesionales, ni tenemos acceso a su compra pues existe un desabastecimiento general, como tiene usted conocimiento.
4.Los modelos de propagación del Virus aconsejan la restricción del movimiento de las personas, por lo que la asistencia de la ciudadanía con frecuencia a nuestros centros, y sin poder tomar las medidas de protección adecuadas, provocará un aumento en el número de contagios, lo que se vuelve especialmente importante si tenemos en cuenta que el sector poblacional que normalmente se dirige a nuestros servicios se considera, en relación a la edad y patologías previas, población de especial protección. Por todo esto se hace evidente el hecho de que nuestros centros son espacios de alto contagio para nuestros pacientes, y nuestro deber de protegerlos es inexcusable, lo que provoca en la población miedo a asistir a nuestros centros de trabajo.
DesdeesteConsejoconsideramosquesehadeasegurarUNICAMENTElapresenciade fisioterapia exclusivamente en aquellas situaciones hospitalarias en donde la actuación urgente delfisioterapeutaseafundamentalparalaevolucióndelpaciente(FisioterapiaenUCI, intervencionesquirúrgicas, patologíarespiratoriaagudanoprovocadaporelCOVID-19,traumatismos con fracturas y la fase inmediatamente post-aguda de enfermedades debilitantes cardíacas y neurológicas).
Fruto de estas argumentaciones, la gran mayoría de los centros de fisioterapia han decidido cerrarsusinstalaciones,parapreservarasílasaluddesuspacientes ydelospropios fisioterapeutas.Estasituación,unidaalaOrdenSND233/2020queindicaclaramenteque nuestros establecimientos pueden permanecer abiertos, provoca una indefensión manifiesta a la hora de poder acceder a las medidas que, en el ámbito laboral, determine el Consejo de Ministros.
Basándonos en ello, y siempre en protección de nuestros pacientes y de la salud de la sociedad, solicitamos el Cierre de TODOS los Centros y Unidades de Fisioterapia en todo el territorio nacional restringiendo la actividad únicamente a las urgencias imprescindibles e inexcusables.