Sordo ha resaltado que por una cuestión "de lógica y precaución" no se van a poder celebrar manifestaciones para esta fecha, ya que, según ha afirmado, en el mejor de los casos, el estado de alarma se acabará a finales de abril.
"No vamos a hacer que nadie corra el más mínimo riesgo convocando manifestaciones si todavía hay riesgo de contagio", ha dejado claro, tras afirmar que la celebración que se haga irá en línea con la realidad epidemiológica, pero "a nadie se le escapa que el formato va a tener que ser distinto".
De hecho, ha afirmado que "no se aventura al decir que este formato está descartado". Por su parte, Álvarez ha señalado que las previsiones dejan claro que el 1º de mayo de este año no va a ser "como todos los primeros de mayo".
Así, ha apuntado que el formato de este año dependerá de los levantamientos de las restricciones que se vayan haciendo por la pandemia, pero que, en todo caso, lo que sí cree es que ese día los derechos de los trabajadores deben formar el eje central de las reivindicaciones de las organizaciones sindicales.