Fue creada en 2010. No tiene trabajadores propios ni sede física pero sí un equipo de 810 voluntarios, según datos del pasado año. Se divide por comisiones de trabajo y su directiva se renueva anualmente.
La Red de Voluntariado de Zamora nació de la inquietud de diferentes colectivos locales y provinciales por promover el voluntariado y en la actualidad está formada por 16 entidades: Centro Menesiano Zamora Joven, Sanagua-Aspace, Centro Juvenil Trascampus, Secretariado Gitano, Voluntariado de la ONCE, Intras, Comité Antisida, Cáritas, Asprosub-Fundación Personas, Azdem, Cruz Roja, Asecal, AECC, Liga Zamorana, AFA y FEAFES.
En lo que va de 2016, ha organizado dos cursos formativos de Mindfullness y reducción del estrés, ambos gratuitos para los voluntarios que forman parte de la Red. Su actual presidenta, Ana Campos, asegura que son una “pieza fundamental en el acompañamiento de enfermos, niños, mayores, discapacitados o jóvenes en riesgo de exclusión social, entre otros”. Como el perfil de las entidades es tan heterogéneo, el perfil de los voluntarios también lo es. Según indica Campos, hay una distribución similar por grupos de edad entre jóvenes, adultos y jubilados aunque reconoce que el minoritario corresponde a los menores de 30 años. Además, destaca la presencia femenina.
La Red sirve de puente entre las personas y las entidades miembro. A lo largo del año, organiza distintas campañas de captación de voluntarios como en las tradicionales Ferias de Bienvenida de la Universidad o en los actos del Día del Voluntario en el mes de diciembre. “Toda la gente que quiere se voluntaria se pone en contacto con nosotros y se le deriva a la entidad pertinente según las preferencias y necesidades”, explica la presidenta.
“Todos tenemos tiempo y podemos dedicarlo de manera altruista; al final la persona voluntaria acaba recibiendo más que da ya que sentir que eres la persona de apoyo y confianza de alguien es muy significativo y satisfactorio”, resume.
Por ello, la actual responsable anima a todos los zamoranos a título individual a formar parte de la Red así como a otras ONG: “el intercambio de experiencias entre entidades nos beneficia a todos para seguir trabajando”. Sin embargo, desde la Red se antoja necesaria la presencia de al menos un trabajador propio para coordinar el recibimiento, integración y reconocimiento del voluntario así como para garantizar su continuidad. La formación y captación de nuevos integrantes y una mayor visibilidad, tanto de las labores realizadas como de las entidades participantes, son otros de los objetivos perseguidos por la Red.
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