El pasado miércoles se celebró el Consejo Interterritorial en el que Gobierno y Comunidades Autónomas valoraban las restricciones a imponer durante este periodo navideño. Castilla y León acudían con una propuesta de un máximo de seis personas y las 00.30 horas como toque de queda.
Un boceto de las Navidades del Covid que finalmente han derivado en reuniones de hasta 10 personas y un toque de queda ampliado hasta la 01.30 horas los días de Navidad y Año Nuevo. En este sentido, Verónica Casado ha asegurado que estas “cesiones se realizaron para alcanzar un consenso beneficioso con medidas consensuadas".
La posición de la Junta, sin embargo, es susceptible a cambios en función de cómo evolucione el virus. Es por ello que se apela a la responsabilidad de los ciudadanos para que "no se produzca un empeoramiento de la situación", asegura Casado quien ya ha puesto el punto de preocupación en "una tercera ola".
"Debemos tener todo el máximo cuidado. Los expertos sanitarios nos dicen que no debería haber navidades, pero los expertos sociólogos apelan a guardar el equilibrio con la salud mental", asegura Casado, entendiendo que sí se cumplen las medidas por parte de los ciudadanos "es posible".
"Va siendo hora de tratar a los españoles como mayores de edad", han sido las palabras de Igea en este llamamiento a la responsabilidad "porque todos sabemos cómo se transmite el virus y qué se puede hacer para combatirlo".
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