El Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (COOCYL) ha lanzado una ambiciosa campaña en las redes sociales con el objetivo de favorecer la salud visual de los ciudadanos ayudándoles en la elección de sus gafas y lentillas para ver mejor sin riesgos.
Con la máxima de que un usuario bien informado y atendido por el profesional correcto obtendrá un mejor servicio y, por tanto, una adecuada atención facultativa para la salud de sus ojos, los mensajes lanzados a través de Facebook o Twitter persiguen llamar la atención con frases impactantes que redirigen a la web https://www.nogafestusgafas.com/, donde se exponen las pautas a seguir para realizar una compra segura y evitar los riesgos.
Tal y como explica la secretaria general de COOCYL, Ana Belén Cisneros, la iniciativa ha supuesto la creación de “una tienda online falsa que vende gafas con graduación, lentillas y gafas de sol a precios muy llamativos, pero al llegar a la web se encuentran con algo muy distinto: mostramos los problemas que puede acarrear a la salud visual de los usuarios una compra de este tipo sin la supervisión de un profesional óptico-optometrista”.
Bajo el lema #NoGafestusGafas, #NoGafestusOjos, la campaña está dirigida especialmente al público potencialmente interesado en las compras de óptica online que no visitan a un óptico-optometrista para adquirir estos productos sanitarios, bien por falta de información o por desconocimiento de las graves consecuencias que conlleva no estar asesorado por un profesional de la salud visual.
“Nos dirigimos a ellos para cazarles mientras navegan a la búsqueda de la compra digital, porque es el momento en el que más receptivos están a la información”, añade Ana Belén Cisneros, con el objetivo de minimizar los riesgos y lograr que estos usuarios necesitados de ayudas ópticas “elijan comprar y reponer sus lentes o lentillas en establecimientos sanitarios de óptica especializados y homologados, con el fin de obtener una atención individualizada y con garantías de control, almacenamiento, registro, servicio y reclamación”.
Con todo, desde COOCYL aseguran que si bien las gafas graduadas y lentes de contacto son ayudas visuales para corregir defectos refractivos y, a día de hoy, ofrecen soluciones para, prácticamente, todos los pacientes con ametropías, es fundamental que los usuarios acudan a los establecimientos sanitarios de óptica para que se les realice una adaptación personalizada.
Con estas premisas, la campaña #NoGafesTusGafas seguirá activa en las redes sociales con mensajes capaces de atraer la atención de los usuarios y adaptados al lenguaje online, precisamente en un momento ultra saturado de publicidad sobre productos de óptica en internet.
“Adquirir gafas graduadas, lentes de contacto o gafas de sol a través de establecimientos virtuales que operan en internet puede conllevar graves riesgos para la salud visual, y por eso desde COOCYL hemos querido contribuir a que esto no suceda”, concluye la secretaria general.
Los mensajes
Con frases como Las gafas perfectas para no ver nada claro o Las lentillas para rascarte el ojo (sin parar), los ópticos-optometristas de Castilla y León, como agentes primarios de la salud visual, difunden a través de la web creada para esta campaña las claves para una compra segura:
Para tus gafas graduadas:
¿Para qué las vas a utilizar? Según el uso que le vas a dar, tienes a tu disposición diferentes modelos y materiales que varían según su resistencia, flexibilidad, dureza…
El óptico-optometrista adaptará los cristales adecuados según tus características de graduación, fisonomía, etc. Esto garantiza que la gafa está en perfectas condiciones para su uso, evitando desequilibrios prismáticos, mareos y fatiga visual.
¿Se ajustan bien? No se trata sólo de que te queden bien. Las gafas tienen que adaptarse: a tu nariz, a tu sien, a tus orejas y, cómo no, a tu cara.
¿Y si las ajustas? Es habitual que, tras comprar unas gafas, al tiempo haya que “reajustar” algo. Tu óptico-optometrista te atenderá encantado.
Para tus lentillas:
¡Cuidado con eso! Las lentes de contacto son productos sanitarios: requieren de una atención individualizada y un control periódico. ¡No te lo saltes!
Elige, según tu actividad, diversas alternativas y reemplazos según tu estilo de vida.
Por eso, es importante adquirirlas en un establecimiento especializado.Allí, tu óptico-optometrista realizará una adaptación individualizada según tus parámetros corneales y la observación por microscopio de todas las estructuras oculares (lágrima, conjuntiva, párpados y película lagrimal): con esto, conseguiremos determinar qué lente de contacto es la perfecta para tus ojos y tu estilo de vida.
Al estar en contacto directo con tus ojos, puede infectarse o dañar tu visión. Haz caso de las indicaciones de uso y horario y acude periódicamente a las citas periódicas de revisión y control antes de cambiarlas.
Para tus gafas de sol:
Todo depende del uso. No es lo mismo utilizar unas gafas en días nublados que en soleados, o en la playa que en la montaña, por ejemplo. Y, ni mucho menos, todas están habilitadas para utilizarlas al conducir un vehículo. Consulta a tu óptico-optometrista para estar seguro.
¿De qué color? El color de la lente es clave. Según su color, tu gafa de sol será más o menos eficiente: amarillo, verde, marrón o gris, cada uno tiene una función y te permitirá ver mejor en unas situaciones u otras.
Las lentes baratas, salen caras. Una lente de mala calidad puede provocar mareos, visión doble, cefalea (dolor de cabeza) y daños oculares. A lo mejor no lo notas, pero… pasa.
No te dejes engañar por el color de las lentes. El color no significa protección: una lente puede llevar color y no tener una protección contra la radiación solar. De hecho, es peor: un cristal oscuro sin protección deja pasar más radiación UV. Consulta a tu óptico-optometrista para verlo… ¡claro!
Solo las gafas de sol adquiridas en establecimientos sanitarios de óptica, bajo el consejo y prescripción de un óptico-optometrista, podrán garantizar la calidad de los filtros y la salud visual y ocular del usuario durante su uso.