El bono social consiste en la aplicación de un descuento sobre el PVPC sobre un límite máximo de la energía consumida (precio voluntario para el pequeño consumidor) en la factura del consumidor, con el fin de proteger a determinados colectivos de consumidores económica o socialmente más vulnerables.
Su regulación se encuentra en el Real Decreto 897/2017, de 6 de octubre, por el que se regula la figura del consumidor vulnerable, el bono social y otras medidas de protección para los consumidores domésticos de energía eléctrica
Se aplicará un descuento del 25% sobre una parte del precio de los Kwh que el ciudadano consuma al año, según su perfil, en caso de ser consumidor vulnerable. Éste se fija a un límite máximo anual de energía consumida, que dependerá de la situación de la unidad familiar que conviva en la vivienda, por lo que dependiendo de la misma, se calculará prorrateando la energía anual máxima recogida en la siguiente tabla entre el número de días que conformen el período de facturación:
En el caso de que se cumplan los requisitos para ser consumidor vulnerable en riesgo de exclusión social, no se abonará en ningún caso el importe de la factura, además no se podrá suspender el suministro.