No sería la cantidad que temía el equipo de gobierno, pero sí habría una importante pérdida económica para el Ayuntamiento si finalmente no se aprueba la liquidación definitiva de la obra del ARU de Los Bloques. Según ha explicado el alcalde, Francisco Guarido, con los informes de la Oficina Municipal de Desarrollo en la mano, la institución perdería la parte de la subvención que corresponde a los casi 600.000 euros que quedan por pagar, una cantidad que ascendería a los 315.000 euros.
Del mismo modo, el Ayuntamiento quedaría en disposición de reclamar que los vecinos del ARU le abonasen 95.000 euros si finalmente no sale adelante la liquidación. Según Guarido, el gasto por vivienda ascendería a unos 300 euros, aunque el alcalde no ha querido aclarar si, vista en el caso, la institución municipal exigiría esta cantidad: "No contemplamos otro escenario que no sea el de aprobar el punto en el Pleno de octubre", ha señalado el mandatario local.
EXPLICACIONES
El alcalde ha realizado un recorrido desde el inicio de los trabajos del ARU hasta la situación actual, centrándose principalmente en la etapa que le ha tocado vivir desde el equipo de gobierno: "Es un proyecto del PP. Con ellos se llevó a cabo el 96% de las unidades de obra", ha remarcado Guarido, que ha recordado también que la dirección de obra es ajena al Ayuntamiento y que el plazo de ejecución, fijado allá por el año 2012, ponía la fecha límite para la entrega en noviembre del 2015.
Dos meses antes, según el alcalde, la empresa Vías y Constructores, adjudicataria del proyecto, solicita la recepción de la obra, una medida que "obliga" al Ayuntamiento a fijar una fecha exacta para ello. Los responsables municipales escogen el día 20 de noviembre, pero "el conjunto de incidencias" que presentaban las viviendas hace que la firma se retrase al 18 de diciembre, cuando "ya todo estaba solventado", salvo el asunto de los ascensores: "Nos obligaba la ley a recibir la obra con ese problema", ha aclarado el mandatario de IU.
Por ello, el Ayuntamiento se reserva el derecho de no abonar la liquidación definitiva hasta que se arreglara el asunto de la estanqueidad en los ascensores. La situación no cambia hasta que el 16 de junio la empresa presenta un proyecto para solucionar el problema. "La dirección de obra lo acepta y el 21 de julio confirma su correcta ejecución tras realizar una prueba", ha subrayado Guarido, que ha señalado que, a partir de ese momento, el servicio de Urbanismo concluye que "no hay motivos para retener" los 600.000 euros y la liquidación va a Pleno con informes favorables.
INTERESES DE DEMORA
El hecho de que los informes técnicos respalden la postura de la empresa permite que Vías y Construcciones tenga derecho a reclamar no sólo la liquidación, sino también intereses de demora al Ayuntamiento, unos gastos que se sumarían a los que ya tendría que asumir la institución municipal si el equipo de gobierno no logra convencer a la oposición para que cambie de postura en el Pleno de octubre: "Estoy convencido de que no vamos a perder ese dinero", ha asegurado el alcalde, que ha apelado al diálogo con los vecinos y los concejales.
ARREGLOS FUTUROS
Guarido ha vuelto a insistir también en que existe un fondo de garantía superior a los 200.000 euros, que permitiría resolver deficiencias en las viviendas durante los próximos tres años. Además, ha aseverado que la empresa ha confirmado que resolvería los problemas que pudieran darse en los ascensores si las lluvias otoñales descubren que la solución dada no ha tenido el efecto deseado.
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