Adrián Fernández y Nicolás Vargas son los creadores de Kemenu, una aplicación "fácil y sencilla", que tiene el objetivo de "ayudar a los restaurantes a digitalizar sus cartas y sus menús" para reducir el riesgo de contagio del COVID-19 entre clientes y personal.
Los desarrolladores han resaltado que "no hay que instalar nada, todo se realiza a través de la plataforma web, lo que da una mayor facilidad a los usuarios", además de que "la aplicación es totalmente gratuita y de código abierto".
"No buscamos ningún tipo de beneficio económico, simplemente queremos crear un portfolio para labrarnos un futuro en el mundo de las TIC", han asegurado. La aplicación fue lanzada el pasado domingo y a ella han recurrido más de una treintena de negocios de Málaga y Almería.
Vargas ha detallado cómo funciona esta herramienta: "un restaurante se hace una cuenta, crea su carta y su menú con sus datos, direcciones y precios y una vez que la tenga ya creada la guarda y se genera un código QR, que se puede escanear con la cámara del teléfono móvil y así tus clientes pueden ver la carta y el menú desde el móvil sin tener que tocar la carta tradicional".
Así, el negocio se hace la cuenta y "puede modificar cuantas veces quiera el menú", ya que el código QR le valdrá para siempre aunque se modifique la carta, por lo que si se imprime no es necesario cambiarlo, ha incidido Vargas.
De momento estas son las funciones de la aplicación, aunque piensa ampliar su capacidad, ha avanzado. "La verdad que la gente se ha volcado y nos ha dado bastantes ideas: hacer las cartas y los menús accesibles a extranjeros, que el restaurante sea capaz de producir varias cartas y traducirlas a varios idiomas y que el cliente pueda elegir el idioma", ha apuntado.
"También queremos meter un poco de reconocimiento de caracteres ocular; básicamente, lo que consiste es que si un dueño tiene cinco o seis restaurantes puede echarle una foto, subirla a la plataforma y la plataforma lee esa foto y el texto que hay, lo convierte a un menú y te da el código QR, así no tiene que pegarse todo el trabajazo", ha añadido Vargas.
Al respecto, ha aclarado que "son todavía características que no hemos sacado pero las estamos trabajando". Asimismo, ha señalado que su idea es continuar sin cobrar "nada a nadie", por lo que "si esto llega a algún lado, a buen puerto, y tiene usuarios, podríamos hablar ya de acelerador de 'startups' y que alguien nos eche una mano con el tema económico, de servidores y dominio, que básicamente lo estamos pagando ahora nosotros", ha indicado.