Casi la mitad de los españoles prevé que su situación económica empeorará con la crisis del coronovirus, mientras que el 42,9% advierte de que gastará menos en su consumo fuera del hogar, según se desprende del barómetro de Aecoc Shopperview.
En concreto, la crisis económica afectará al bolsillo de los españoles en su vuelta a la 'nueva normalidad', aunque un 38,7% ha asegurado que mantendrá su inversión en locales de restauración, mientras que un 18,4% que afirma que incrementará su gasto.
El control en el gasto en el consumo fuera del hogar impactará también en el día a día de los consumidores, ya que hasta el 39% afirma que, una vez pasada la crisis, empezará a llevarse 'tuppers' de comida preparada al trabajo para evitar salir a comer fuera.
Tras dos meses de restaurantes y bares cerrados después de decretarse el estado de alarma en España, muchos consumidores ven en bares y restaurantes un pilar en su normalidad y reconocen que esperan retomar sus rutinas.
"El 28% de los españoles quiere volver a los bares, restaurantes y cafeterías durante la desescalada, por lo que hay una clara voluntad de retomar nuestra vida anterior, pero los consumidores también nos advierten que quieren hacerlo con cautela y respetando las medidas que garanticen su seguridad", ha explicado la responsable del área de estrategia comercial y marketing de Aecoc, Rosario Pedrosa.
Sin embargo, el 23% de los consumidores reconoce que el confinamiento ha mejorado su valoración sobre el sector de la restauración durante la crisis sanitaria del coronavirus, mientras que siete de cada diez mantienen la percepción que ya tenían.
En este contexto, Aecoc ha puesto en marcha junto con Hostelería de España y FIAB el proyecto 'Juntos con la Hostelería' para contribuir a la reactivación y recuperación de un sector clave para la economía española.
El impacto de la crisis en el consumo fuera del hogar también tiene su impacto en el 'delivery', que, hasta el inicio de la Fase 1 de la desescalada, fue la única opción de negocio para la restauración.
El barómetro refleja la buena acogida que ha tenido el servicio a domicilio y las fórmulas de encargo que han habilitado muchos restaurantes durante el confinamiento. Según la encuesta, el 9,1% de la población ha pedido comida a domicilio en las últimas semanas a través de aplicaciones como Glovo, Just Eat o Deliveroo, y el 8,1% ha optado por pedir comida a los locales para recogerla en los establecimientos y comerla en casa.
Sin embargo, la incertidumbre económica también tiene un impacto en la inversión que destinan los españoles a los pedidos de comida, ya que el 45,8% de los consumidores también planea reducir su gasto en los servicios de 'delivery'.
El estudio muestra que una de las mayores preocupaciones de los consumidores es la seguridad y apunta al 'contactless' como una de las tendencias que marcará el futuro de la hostelería en la 'nueva normalidad'.
De esta forma, el 83% de los españoles considera que deben mantenerse al máximo las medidas de seguridad e higiene para combatir el coronavirus una vez pasado el confinamiento y el papel que, en ello, puede jugar la tecnología.
Así, el 44,2% de los encuestados reclama la opción de poder pagar a través de su 'smartphone' y uno de cada cuatro consumidores valoraría hacer sus pedidos a través del móvil para garantizar las distancias de seguridad.