La Consejería de Empleo, a través del ECYL, concede 1,2 millones de euros en subvenciones a las Fundaciones Generales de las universidades públicas de Castilla y León, con el objetivo de financiar los gastos de un programa de prácticas no laborales, hasta agosto de 2019, cuyos beneficiarios serán 250 titulados universitarios y de Formación Profesional.
Las entidades que gestionarán este programa de prácticas durante el curso 2018/2019 serán: la Fundación General de la Universidad de Burgos, la Fundación General de la Universidad de León y de la Empresa, la Fundación General de la Universidad de Salamanca y la Fundación General de la Universidad de Valladolid, que recibirán 300.000 euros cada una.
Destinatarios
El programa, de seis meses de duración, está dirigido a aquellas personas que estén en posesión de un título Universitario o de Formación Profesional, o de las Enseñanzas escolares de régimen especial, desde el 1 de enero de 2014 y antes de la fecha de la incorporación a la estancia en prácticas; asimismo, se deben encontrar en situación de desempleo, inscritos en el Servicio Público de Empleo de Castilla y León en el momento de iniciarse las prácticas. Se excluyen de este concepto los inscritos como “demandantes de otros servicios”.
Por otra parte los destinatarios no podrán haber realizado prácticas no laborales por la titulación por la que acceden a este programa de duración, superior a 184 días; y tampoco deberán haber trabajado por cuenta propia ni haber mantenido una relación laboral, acorde a la titulación por la que acceden a este programa, durante un periodo superior a 184 días.
Por último cada Fundación será la encargada de comunicar el alta del usuario en el Régimen General de la Seguridad Social y abonar las cotizaciones correspondientes. Asimismo, pagará mensualmente la cuantía de la beca a cada participante en las prácticas.
La Estrategia Integrada de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos Laborales e Igualdad y Conciliación en el Empleo 2016-2020 tiene como objetivo mejorar todos los niveles de ocupación. Para ello se establece como prioritario el colectivo de jóvenes que se encuentren en situación de desempleo.