El Covid-19, pandemia por la cual seguimos los días en confinamiento, ha provocado que se acentúe la vulnerabilidad, indefensión y desprotección de muchos ciudadanos. Cáritas Diocesana de Zamora ha reforzado la atención a estas personas. El servicio de acogida y atención primaria incentiva sus recursos económicos con 17.000 euros, a mayores del presupuesto que se destina normalmente, para dar respuesta a las personas que precisan la ayuda de Cáritas en estos momentos.
El servicio de acogida y atención primaria de Cáritas Diocesana de Zamora se realiza por teléfono, en el caso de que las atenciones no revistan de urgencia y se puedan solucionar por esta vía, en horario de 11 a 14 horas. En el mismo horario tiene lugar la atención presencial mediante la cual se realizan los acompañamientos y seguimientos de las familias y personas. En estos días son muchos quienes no cuentan con los ingresos suficientes para hacer frente a los gastos básicos y que precisan ayudas para alimentación, luz, agua, alquiler, gastos farmacéuticos…
Desde que se decretara el estado de alarma en nuestro país y comenzase el tiempo de confinamiento hasta primeros días de este mismo mes en Cáritas Diocesana de Zamora se ha apoyado, a través del servicio de acogida y atención primaria, a 580 personas y 217 familias. Estos datos son el reflejo de una situación de precariedad acentuada por esta crisis sanitaria en personas que ya se encontraban en exclusión social.
El Delegado-Director de Cáritas Diocesana de Zamora, Antonio J. Martín de Lera, afirma que son “tiempos duros, dramáticos y difíciles en los que Cáritas sigue estando, más que nunca, al lado y al servicio de las personas más necesitadas y excluidas. Nuestros centros de personas sin hogar, nuestras acogidas (la demanda se ha incrementado, llegando en algunos casos a triplicarse), nuestros servicios de atención, nuestros centros de atención a personas con problemas de droga y nuestras comunidades terapéuticas, siguen abiertas y atendiendo con energía y fuerza a todas las personas que vienen a nosotros”.
Además, destaca “la atención especial a los mayores en las residencias y en sus hogares, estando a su servicio y pendientes de ellos.” Por último, Antonio Martín de Lera agradece “a nuestros voluntarios y trabajadores que siguen dando lo mejor de cada uno y dedicando su tiempo y sus vidas a atender a todos”, y añade que también agradece “a todos los que nos apoyan con su oración y con sus donativos, tanto particulares como instituciones y empresas. Muchas gracias a todos. Que el Señor Resucitado nos de su fuerza y su gracia para poder seguir sirviendo a todos los que pone en nuestro camino. Mucho ánimo y mucha fuerza para todos.”