La Junta de Castilla y León comenzará la semana que viene a ingresar los 130 euros de ayuda frente a la pobreza energética comprometidos para las familias más vulnerables de la Comunidad, 45.000 según la estimación del Gobierno autonómico.
Así lo anunció hoy, durante el pleno de las Cortes de Castilla y León, la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta, Isabel Blanco, que también recordó el anuncio realizado hace diez días, junto a las entidades locales, para abrir una nueva línea de ayudas de emergencia, de ocho millones de euros en dos años, para combatir la pobreza energética y ayudar a las familias más desfavorecidas.
Además, Blanco también reivindicó el trabajo de la Junta para ampliar el convenio con las empresas eléctricas, con el que ya el año pasado se evitó el corte de suministro para 400 familias, y la labor del Gobierno autonómico para evitar 257 desahucios con fondos autonómicos.
Todo ello como respuesta a la pregunta realizada por la procuradora socialista en las Cortes, Nuria Rubio, en relación a si las ayudas económicas que destina la Junta para las personas más vulnerables son suficientes, ante lo que Blanco respondió que, además de las medidas anteriormente citadas, el Gobierno autonómico también complementa el Ingreso Mínimo Vital, puesto en marcha por el Gobierno, para 2.222 familias que “cobran menos con el ingreso mínimo vital que con la renta garantizada de ciudadanía”, y plantea la revisión para aumentar la cantidad destinada a las ayudas de emergencia para ayudar a las familias más vulnerables.
“Pero tenemos que seguir trabajando para ayudar a las familias”, continuó Blanco, que afeó que, frente a esta tesitura, la procuradora socialista “entre Castilla y León y Pedro Sánchez, siempre se queda con Sánchez”. Un presidente del Gobierno del que aseguró “aún no nos ha ingresado el bono térmico” de 2020 mientras “el Gobierno de Mañueco empezará a ingresar a partir de la semana que viene 130 euros a las personas más vulnerables”.
Gobierno “para unos pocos”
La réplica la dio la procuradora socialista Nuria Rubio, que tras su pregunta criticó el “espectáculo bochornoso de precampaña” que, bajo su criterio, está realizando la Junta de Castilla y León con sus anuncios “en las últimas semanas” mientras no llega “ni un solo euro a los castellanos y leoneses”.
Se centró entonces la procuradora socialista en la pobreza energética bajo la premisa de que “no se puede consentir que haya personas que no puedan permitirse ni encender la calefacción”, ante lo que el Gobierno de España “ha aprobado un paquete de medidas para ampliar la protección de los consumidores ante la escalada de precios, ha duplicado el presupuesto para bono social térmico hasta los 2,5 millones y ha introducido nuevas obligaciones para las empresas eléctricas para mejorar el modelo en su conjunto”.
“Ante un problema, trabajo y soluciones efectivas”, aseguró Rubio, contraponiendo estas actuaciones a la labor de la Junta con “compromisos vacíos”, pese a ser la Comunidad que “más financiación ha recibido”, porque “gobiernan solo para unos pocos”.