Cambio de chip tras la Copa. No es algo que cueste mucho. La liga es el día a día, para lo que competimos, nuestro objetivo final. La verdad que es un cambio de chip después de lograr algo muy bonito y una vez pasado ese partido hemos cambiado y hemos vuelto a la realidad.
Sorteo. La verdad que no tengo preferencia en particular. Queremos avanzar una ronda más y tampoco podría decir un rival que me haga especial ilusión. Quiero un partido igual de bonito que el del Sporting, que haya perfecta comunión grada y afición e invito a la gente a que se sume a este bonito reto.
Situación personal. Todos queremos jugar el máximo de minutos. Tenemos una plantilla muy competitiva, que se deja todo en cada balón como hemos visto en todos los partidos que hemos disputado. En los entrenamientos se compite más que en los partidos para ganar el puesto y estoy con ganas de volver a tener minutos, disfrutar y aprendiendo de mis compañeros.
Aprendizaje. El aprendizaje va en todos los ámbitos, realizamos dinámicas a nivel personal, deportivo, como de cercanía para estar más juntos. Eso es algo que nos da mucho a nivel personal, nos transmite confianza entre todos y eso genera un vínculo que es bonito y nunca había tenido una oportunidad de vivir algo así. Lo que estamos logrando y podemos lograr es muy bonito.
Tordesillas. El campo es difícil, un rival que viene de menos a más por lo que no esperamos un rival fácil independientemente de la tabla, porque no la miramos. Todos los puntos que se juegan son igual de valiosos y es uno de los campos más difíciles de grupo, además de por la climatología que puede afectar. Asimilamos el partido con ambición de sumar tres puntos como cada fin de semana.